Agricutura
El Centro de Transferencia Agroalimentaria al servicio del sector vitivinícola aragonés para mejorar su competitividad
El consejero Olona ha participado en una jornada técnica para dar a conocer las acciones de transferencia varietal de la vid en Aragón
El Centro de Transferencia Agroalimentaria (CTA) del Gobierno de Aragón realiza estudios en el ámbito de viticultura y enología, a través de las Unidades de Enología y de Tecnología y Mejora de la Vid, que pone a disposición del sector con la intención de mejorar su competitividad en el mercado. El CTA trabaja desde hace tres décadas en los procesos de selección clonal de variedades propias de Aragón y en la recuperación y conservación de material de viñas antiguas diseminadas por todo el territorio, con especial incidencia en aquellas cepas que se observan como desconocidas o diferentes.
Joaquín Olona destaca labor del Centro de Transferencia Agroalimentaria
El consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente ha asistido hoy a una jornada técnica que ha servido para trasladar al sector vitivinícola aragonés dos acciones de transferencia varietal. Una de mejora genética a través de dos clones de Mazuela (Cariñeña) obtenidos del proceso de selección clonal -ARA 50 y ARA 52- y otra de recuperación de cuatro variedades antiguas tintas singulares -Parrel, Aubun&Ambrosina, Gonfaus y Benedicto-, procedentes del Banco de Germoplasma de Vid de Aragón.
Olona ha destacado este trabajo llevado a cabo por el CTA como un claro ejemplo de transferencia de conocimiento. “Los medios técnicos y humanos del Gobierno de Aragón en materia de investigación se ponen a disposición del sector para uno o varios fines concretos. En este caso los beneficios son múltiplex, supone la recuperación y conservación de variedades propiamente aragonesas, contribuyendo además a la conservación de la biodiversidad y nuestro patrimonio genético. Asimismo, Olona ha hecho hincapié en el impacto comercial que la innovación supone en un mercado que busca cada vez más la singularidad y diferenciación de los vinos. "Debemos de ser útiles para el sector para ayudarle en su reto comercial", ha manifestado.
En la jornada han estado presentes el director del Centro de Transferencia Agroalimentaria, Jesús Cáncer, y los jefes de las Unidades de Enología y de Tecnología y Mejora de la Vid, Ernesto Franco y Alberto Pavón, respectivamente. En el transcurso del acto los representantes de las Denominaciones de Origen Protegidas, Indicaciones Geográfica Protegidas, las bodegas, técnicos de viñedo y enólogos han podido degustar algunos de los vinos presentados.
Pasos a seguir en la confección y transferencia de material del Banco de Germoplasma
-Prospección. Localizar viñas antiguas, visitarlas y marcar las cepas que se ven diferentes e interesantes, con potencial. Esas variedades se incorporan al Banco.
-Estudio. Mediante distintos proyectos (propios, estatales y europeos), se ha procedido a la identificación molecular de unas 600 entradas de vid, de las más de 800 de las que dispone el Banco. El resultado ha constatado que incluye alrededor de 220 variedades distintas, de las cuales 67 son desconocidas. Para su caracterización se han utilizado técnicas moleculares y como referencia, las bases de datos nacionales y europeas.
Por otro lado, de las variedades de la colección que se intuyen como más interesantes se ha procedido, en primer lugar, a su vinificación en las bodegas piloto del CTA, en pequeñas cantidades. El vino obtenido se analiza y se cata. Las variedades que sobresalen o manifiestan “elementos singulares”, se han implantado en parcelas de zonas vitícolas, con mayor número de plantas, para volver a evaluar su potencial enológico, pero esta vez elaborando en condiciones similares a las industriales, con una mayor cantidad de uva obtenida en condiciones similares a la de cualquier otra viña.
-Transferencia. Si la variedad sigue manifestando ese interés o singularidad, se procede a darlo a conocer a las bodegas que puedan estar interesadas.
-Autorizaciones. Para Las variedades que manifiestan características singulares y que el sector ha demostrado interés por ellas, se ponen en marcha los diferentes mecanismos técnicos administrativos para su inclusión en la lista aragonesa de variedades de vid. Dependiendo del tipo de variedad (variedades minoritarias conocidas o variedades desconocidas), se deben realizar diferentes expedientes con el Centro de Evaluación de Variedades de Vid de Murcia, la Oficina Española de Variedades Vegetales, a nivel central, y con el propio Departamento, a nivel autonómico.
El impacto en el sector aragonés es incuestionable
El trabajo llevado a cabo en el Centro de Transferencia Agroalimentaria requiere de muchos años de estudio e inversión que de esta forma se ahorran las bodegas.
En 2021 se ha transferido a vivero material de las variedades Parrel, Aubun&Ambrosina, Gonfaus y Benedicto (autorizadas) y Albana, Betrurian y Greta (experimentales, pendientes de autorizaciones administrativas) del Banco para su implantación en viñedos de bodegueros, como siete integrantes de la agrupación de bodegueros Vignerons de Huesca, Bodegas Aragonesas y Bodegas Langa, así como viticultores particulares de Teruel y Zaragoza.
Otras bodegas han mostrado interés, si bien todavía no se ha plasmado de forma concreta la colaboración.
Futuro proyecto de cooperación
Actualmente, se está en conversaciones con las bodegas de la agrupación Vignerons y la Escuela Politécnica Superior de Huesca para la elaboración de un proyecto de transferencia de conocimiento mediante un Grupo de Cooperación dentro de la convocatoria de ayudas del Programa de Desarrollo Rural (PDR). El Gobierno de Aragón ha apostado firmemente por esta línea destinando 18,3 millones de euros que han servido para crear 184 grupos de cooperación en los últimos seis años, de los cuales 92 ya han sido ejecutados.