El Gobierno de Aragón destinará 4,8 millones de euros para la ejecución de las balsas laterales de la acequia de Ontiñena
Se trata de la primera actuación en la que se aplicará la modificación legal que permite un mecanismo voluntario y alternativo de financiación de las actuaciones por parte de los regantes
El Ejecutivo considera esta actuación estratégica para la reactivación de la economía y el empleo en el regadío de Monegros II
El Consejo de Gobierno ha aprobado el acuerdo por el que se autoriza un gasto plurianual al Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad correspondiente al Proyecto de ejecución de las balsas laterales de San Gregorio II y la Portellada de la acequia de Ontiñena (Huesca), en la zona de regadíos de interés nacional de Monegros.
El sistema de riego de la Comunidad de Regantes de la Acequia de Ontiñena, que comprende aproximadamente 8.500 hectáreas, depende para su funcionamiento de la realización de tres balsas: San Gregorio I, San Gregorio II y la Portellada. La primera de ellas era la única construida, quedando pendiente la ejecución de las otras dos balsas que suponen una inversión de 12.000.730 euros.
Los trabajos tienen la consideración de obras de interés común por lo que estarán subvencionadas en un 40% por la Administración de la Comunidad Autónoma de Aragón, lo que supone que el Gobierno aragonés abonará 4.800.292 euros en un plazo de ejecución de las obras de 40 meses.
De forma tradicional, la ejecución de las obras de regadío en zonas de interés nacional se han venido financiando al 100% por las administraciones y, posteriormente una vez ya en riego, los agricultores beneficiarios efectuaban el pago de la parte que les corresponde y que asciende al 60 % de las obras calificadas de interés común. Este sistema venía regulado por la Ley de Reforma y Desarrollo Agrario del año 1973.
Las dificultades que han atravesado las diferentes administraciones en los últimos años por los efectos de la crisis, han conducido a que en determinados sectores con riegos aprobados, con impactos ambientales autorizados, concentraciones parcelarias finalizadas y con obras de caminos, drenajes e incluso red de distribución del agua hasta parcela terminadas, resultase imposible su puesta efectiva en riego por la falta de unas u otras infraestructuras básicas. Esta situación se produce en zonas de interés nacional como Monegros, Bardenas, Cinca o Civán.
Ante esta situación, el actual Gobierno promovió a través de la Disposición Adicional Octava de la Ley 2/2016, de 28 de enero, de Medidas Fiscales y Administrativas de la Comunidad Autónoma de Aragón, un mecanismo voluntario y alternativo de financiación de estas actuaciones. Este mecanismo prevé que, previo acuerdo de la comunidad de regantes afectadas, los regantes puedan anticipar al momento de ejecución de las obras la parte de financiación que les corresponde, es decir, el 60% del coste de las obras declaradas de interés común.
Las más de 8.000 hectáreas correspondientes a la acequia de Ontiñena (Ontiñena y Ballobar, en Huesca) en la zona de Monegros II se hallan es esta situación. De ellas, en cerca de 7.000 está construida incluso la red de riego hasta el hidrante en cada parcela. Sin embargo, únicamente se están regando algo más de 2.000, dado que de las tres balsas de riego que deben confortar el sistema de regadío solo está construida la de San Gregorio I. La situación hacía imposible rentabilizar en términos de generación de economía, empleo y oportunidades de futuro en nuestro medio rural, una inversión ya ejecutada de 70 millones de euros en esa zona por las diferentes administraciones. En consecuencia, esta actuación resulta estratégica para este Gobierno dado que permitirá la movilización de recursos muy significativos del sector privado en las inversiones que deberán ejecutar los regantes, así como la consecuente generación de economía y empleo cuando entren en explotación.