Lambán considera que la puesta en marcha de la Ley de Igualdad y el I Plan Estratégico con articulado y ejes específicos para mujeres rurales ayudará a combatir la doble desigualdad

El Presidente de Aragón, Javier Lambán, ha inaugurado hoy en Zuera el Día Internacional de la Mujer Rural, en la que también han participado los consejeros de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, Joaquín Olona, así como la titular de Ciudadanía y Derechos Sociales, Mariví Broto, que clausurará el evento.

Lambán ha encontrado “muy acertada” la celebración de esta jornada, centrada en el reto demográfico analizado desde la perspectiva de género, para poder analizar la realidad a la que se enfrentan las mujeres, que padecen doblemente las desigualdades.

En este contexto, ha considerado muy oportuna la reciente aprobación de la primera Ley para la Igualdad de Oportunidades de Mujeres y Hombres en Aragón, que contiene articulado específico sobre mujeres rurales. Igualmente, la norma contiene el I Plan Estratégico para la Igualdad de Mujeres y Hombres en Aragón, que contiene un eje específico con medidas concretas para la promoción de la igualdad de oportunidades de las mujeres en el medio rural. Desde el Gobierno de Aragón también se ha recuperado la línea de subvenciones para el apoyo al tejido asociativo de mujeres, fundamental en el medio rural, como cohesionadoras del territorio y se han reforzado los centros de atención a la mujer en las comarcas, aumentando presupuestariamente más de un 80% en la presente legislatura.

El presidente aragonés ha recordado que caminar hacia la igualdad es un planteamiento transversal de todo el ejecutivo y ha recordado otras iniciativas como la que hoy mismo ha suscrito la titular de Economía para ampliar el Programa de Emprendimiento Rural, una de las iniciativas de esta legislatura para apoyar la economía en el medio rural. El emprendimiento rural, desarrollado en el Pirineo aragonés se amplía a cuatro comarcas turolenses, constituye uno de los mecanismos más importantes para evitar la despoblación en municipios con hasta 5.000 personas censadas. Ha animado a las emprendedoras turolenses a inscribirse y espera que próximamente se amplíe a comarcas zaragozanas, para ayudarse a poner en marcha negocios sólidos en estas zonas y salir al mercado. De esta forma, se impulsa la generación de nuevas actividades productivas, vinculadas tanto a sectores tradicionales como a sectores emergentes.

Respecto a datos de emprendimiento en Aragón, de 105.564, solo 36.332 son mujeres. En porcentajes, el 66% de hombres trabajadores por cuenta propia frente al 34% de mujeres. Según datos del Instituto Aragonés de Estadística y de la Tesorería General de la Seguridad Social, la actividad agricultura, ganadería, silvicultura y pesca representaba el 75,33% en hombres y el 24,67% mujeres.

La situación laboral de la mujer rural se ve perjudicada, además, por el hecho de que la mayor parte de los titulares de explotaciones agrarias en Aragón son varones: 35.158 hombres frente a 10.300 mujeres.

En el ámbito rural la población disminuye, la falta de oportunidades en el ámbito formativo y el desigual acceso a los recursos, son algunas de las causas del despoblamiento rural. La mujer es fundamental en el territorio rural. Sin su participación sería inviable el mantenimiento de la actividad agraria y ganadera en España. Esto ha sido tenido en cuenta en la conferencia inaugural que ha corrido a cargo de Javier Allué, comisionado contra la despoblación del Gobierno de Aragón. Posteriormente, se ha llevado a cabo un panel de experiencias titulado “Las mujeres que construyen Aragón” y en el que participaron María José Liso, apicultora y titular de una finca de regadío; Mariví Gallent, emprendedora de Mermeladas Maro Golosa; Inés Artero, ingeniera técnica agrícola, y Cristina Bentué, miembro de Continuum Security, empresa de ciberseguridad.

Además de las jornadas, se ha celebrado una feria de emprendedoras del medio rural aragonés, instalada toda la mañana en el Centro de Convivencia de esta localidad.

La mujer en el medio rural. Realidades y retos

El mundo rural supone el 20% de la población mundial, y ocupa el 80% del territorio (hay más de 600 millones de mujeres rurales).En España representa el 24% de la población y algo más del 80% del territorio, dedicándose fundamentalmente a la actividad agraria. Y en Aragón, las mujeres que viven en el medio rural, en municipios menores de 20.000 habitantes, son más de 270.000, del total de la población de mujeres que en Aragón es de 665.357.

Pese al importante peso que tienen, las cifras continúan poniendo de manifiesto la falta de visibilidad de la actividad de las mujeres del medio rural. Las afiliaciones en alta laboral al Régimen de la Seguridad Social, cuantifican la ocupación en el sector de la agricultura, ganadería, silvicultura y pesca, en un 17,85 % de mujeres frente a un 82,15 % de hombres.

Uno de los ámbitos más relevantes para el mantenimiento del medio rural, y en el que las mujeres juegan un papel crucial es el ámbito educativo. En general en las zonas urbanas y periurbanas, las mujeres con estudios superiores son más numerosas que las que viven en el medio rural.

Existe una gran diferencia entre el nivel cultural de las mujeres rurales jóvenes y mayores. Según datos de Población y Vivienda de 2011, sólo el 2,3% de las mujeres rurales menores de 45 años tienen un nivel de estudios inferior a los estudios primarios, mientras que este porcentaje asciende al 8,2% en el caso de las mujeres comprendidas entre los 45 y los 64 años de edad se eleva considerablemente (43,8%) en el caso de las mujeres de 65 ó más años.

En cuanto a la situación laboral de las mujeres rurales la tasa de actividad femenina en el medio rural es de 42,8%, 7,4 puntos por debajo de la tasa de actividad femenina nacional (50,2%).

En cuanto a la proporción de mujeres ocupadas del medio rural que se dedica a la agricultura, ésta es del 9,2%, un dato por debajo del porcentaje ocupado en el sector industrial. Por su parte, el porcentaje de hombres del medio rural dedicados a la agricultura es del 21,1%.

Por otro lado, en el ámbito laboral, las mujeres en general, y más especialmente las que habitan en el medio rural están ocupadas en empleos a tiempo parciales en mayor medida que los hombres y además persisten las desigualdades retributivas.

Las cooperativas de trabajo asociado también ocupan un puesto relevante en la economía social. En España existen 12.038 empresas cooperativas de todo tipo que dan trabajo a más de 230,637 personas. Las mujeres son también las que llevan el mayor peso de estas cooperativas ya que el 55 % de las personas que trabajan en este tipo de cooperativas son mujeres.

En el ámbito rural la población disminuye, la falta de oportunidades en el ámbito formativo y el desigual acceso a los recursos, son algunas de las causas del despoblamiento rural. La mujer es fundamental en el territorio rural. Sin su participación sería inviable el mantenimiento de la actividad agraria y ganadera en España.

Existen problemas comunes y que se interrelacionan en los distintos ámbitos: social, laboral, económico, como la invisilibilidad en el Trabajo, sobrecargas familiares, desventajas en el aspecto formativo e informativo, etc.

Además de las anteriores dificultades con las que el sector de la mujer se encuentra, hay que añadir aquellas dificultades que son específicas del ámbito rural como el envejecimiento progresivo de la población, la pérdida de servicios en los núcleos rurales debido a disminución de la población en los mismos, menores oportunidades de empleo que proporcionan el sector primario, falta de diversificación, menor peso de puestos de trabajo cualificado, mercado de trabajo más estrecho, dependencia económica y de servicios de núcleos urbanos.

Ante estas dificultades, se plantean varios retos como la necesidad de tomar un papel activo en concienciar a las administraciones, entidades socioeconómicas y población en general de su verdadero papel económico, social, cultural y medioambiental en el ámbito rural, tratando de aumentar la conciencia empresarial en la sociedad y en la propia mujer que realiza actividades agrícolas y ganaderas, abordando el emprendimiento y el liderazgo femenino.

Además, es preciso abordar la conciliación con su vida familiar y su incorporación al proceso de toma de decisiones en el medio rural, aumentando la participación y representación de las mujeres en puestos de responsabilidad y decisión económica, social y política del medio rural.