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Viernes, 22 de noviembre de 2024

Medio Ambiente

Una red de control permitirá investigar la hidrología e hidrogeología del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido

El Instituto Pirenaico de Ecología (IPE) y el Instituto Geológico y Minero de España (IGME) instruirán al personal del Parque en el manejo de los aparatos portátiles de campo

El Consejo de Gobierno ha aprobado el convenio de colaboración entre el Gobierno de Aragón, el Instituto Pirenaico de Ecología (IPE) y el Instituto Geológico y Minero de España (IGME) para el mantenimiento de una red de control hidrológico en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido (PNOMP).

Concretamente, el convenio consiste en implantar y mantener una red de control hidrológico con la finalidad de establecer, a medio y largo plazo, series de datos que permitan investigar la hidrología e hidrogeología del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Dada la reciente incorporación del PNOMP a la red de seguimiento a largo plazo LTER se considera de gran importancia e interés el desarrollo de una estructura estable que permita la inclusión de parámetros hidrológicos dentro de los protocolos definidos en la red de seguimiento LTER y en los programas de seguimiento de cambio global del Organismo Autónomo de Parques Nacionales.

El IGME y el IPE prestarán asesoramiento a la dirección del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, en el establecimiento y mantenimiento de una red de control hidrológico e hidrogeológico, para el conocimiento y la correcta gestión de los recursos hídricos del Parque. Dichos recursos hídricos se consideran esenciales en la génesis, desarrollo y evolución del Parque, constituyendo además un elemento clave para la biodiversidad.

El IGME y el IPE propondrán los puntos a incluir en dicha red de control: manantiales, estaciones de aforo, toma muestras de agua de lluvia, nieve, glaciares y lagos (siguiendo la topología marcada por la Directiva marco del Agua) recomendando la frecuencia del control así como la inclusión o sustitución de dichos puntos en función de los resultados que se vayan obteniendo. Asimismo, ambos centros recomendarán los parámetros de control a considerar en cada punto (caudal, parámetros fisicoquímicos medidos “in situ”, análisis químicos, análisis isotópicos…). Se diseñará y elaborará una base de datos común siguiendo los protocolos de LTER y tanto la propiedad como la explotación de dichos datos se realizarán de forma conjunta.

Por su parte, la toma de datos y los muestreos de agua necesarios para el mantenimiento de la red de control hidrológico e hidrogeológico se llevarán a cabo principalmente por parte del personal del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, bajo el asesoramiento del IGME y el IPE. La frecuencia inicial para la toma de datos y muestreo será mensual, siempre y cuando las condiciones meteorológicas permitan el acceso a los puntos de control. En función de los resultados obtenidos, el IGME y el IPE propondrán la posible modificación de la frecuencia de control así como la posible sustitución o ampliación de dichos puntos de control.

Para garantizar la fiabilidad y representatividad de los datos obtenidos, el IGME y el IPE formarán al personal del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido responsable de llevar a cabo los controles y muestreos necesarios. Para ello, el IGME y el IPE instruirán al personal del Parque en el manejo de los aparatos portátiles de campo (pH-metro, conductivímetro, mediada oxígeno disuelto y alcalinidad principalmente) así como en el protocolo de muestreo según el tipo de análisis deseado.