Susín confirma el refuerzo de los servicios de atención temprana y apunta a la renovación conjunta de contrato y concierto en 2027

El presupuesto que destina para todo 2024 el Gobierno de Aragón a la atención temprana se ha ampliado en un 13% respecto al año 2023 y asciende a 8.953.000 euros: además, la lista de espera para que niños de 0 a 6 años con trastornos del desarrollo o en riesgo de tenerlos accedan a un recurso para tratarse se ha reducido en un 53%. Son datos que ha expuesto en el pleno de las Cortes de Aragón la consejera de Bienestar Social y Familia, Carmen Susín, interpelada por el Grupo Parlamentario Socialista: ante estas evidencias, ha aseverado, no cabe hablar “ni de recortes ni de privatización”.

Susín ha recordado la reciente batería de medidas con las que el Gobierno de Aragón pretende seguir reduciendo en lo posible el plazo que hay desde que un niño con dificultades obtiene su diagnóstico hasta que accede al apoyo que necesita.

“No nos vamos a quedar de brazos cruzados mientras haya un niño que pueda recibir atención”, ha afirmado la responsable de la Consejería de Bienestar Social y Familia: “Hemos utilizado los instrumentos que teníamos para ampliar los equipos actuales, pero hasta 2027 no podemos licitar el nuevo contrato”.

La Consejera ha recordado la próxima finalización del contrato que rige la prestación de servicios en atención temprana, el próximo 31 de diciembre de 2024, que no permite una ampliación; además el acuerdo de acción concertada para la atención temprana itinerante finaliza en 2027. 

El Gobierno ha decidido propiciar, una vez consumada la ampliación de dos equipos itinerantes para atender el área rural de Zaragoza, que confluyan contrato y concierto y poder licitarlos conjuntamente cuando finalicen ambos; contrato y concierto, y así se comunicó a las entidades que prestan los servicios.

Susín ha remarcado que esta línea de subvenciones que no está pensada para eliminar la lista de espera, ya que los niños y niñas que están en ella siguen formando parte y conservando su puesto en ellas para acceder al servicio. Los 200.000 euros presupuestados en ayudas -500.000 en 2025- son para que las familias que están a la espera de que un menor de 6 años tenga plaza dentro del programa de atención temprana puedan afrontar el pago de la atención hasta que llegue su turno.

En respuesta a la acusación de que supongan una ‘privatización’ al ser las familias quienes adelantan el pago del servicio que prestan las entidades, ha compartido varios ejemplos de un mecanismo similar: el de las ayudas individuales a la dependencia, que creó el Ejecutivo anterior.

“¿Me quiere decir que esas ayudas dejan fuera a personas vulnerables que no pueden comprar una grúa, un audífono, una silla de ruedas, adaptar las barreras de su casa?”, ha inquirido en su segunda intervención a la diputada interpelante. Es lo mismo que sucede con las ayudas de campamentos del Instituto Aragonés de la Juventud, las ayudas para cursar másteres o las contempladas para desplazamientos y alojamiento por intervenciones y tratamientos sanitarios dentro y fuera de la Comunidad Autónoma por razones de tiempos de espera quirúrgicos: todas ellas se pagan contra factura, ha recordado la Consejera.

“Además esta atención temprana financiada a través de las becas-subvención sólo pueden prestarla las entidades acreditadas, es decir, las que están actualmente prestando los servicios de atención temprana, con la misma intensidad y con la misma calidad”, ha indicado Carmen Susín; como novedad las ayudas también permiten prestar la atención en el domicilio.

Han podido solicitar esta ayuda este año las familias de todos aquellos niños de 0 a 6 años que tienen reconocida la necesidad de acceder a un servicio de atención temprana por un equipo de valoración del IASS referido a psicoterapia, estimulación precoz, fisioterapia, psicomotricidad o logopedia y que, habiendo solicitado plaza en la red pública de centros de atención temprana o en un equipo itinerante, está o ha estado a la espera de tratamiento.