Derechos Sociales
Susín denuncia que 30.000 aragoneses van a quedar excluidos de la ayuda alimentaria con el sistema de tarjetas monedero
El programa impulsado por el Ministerio de Derechos Sociales debería haber comenzado el 1 de mayo tras varios retrasos, pero las dificultades técnicas lo han hecho “inviable”
“Señorías, hoy es 7 de mayo y todavía no tenemos toda la información sobre cómo tenemos que implantar las Comunidades Autónomas este programa”. Así ha resumido Carmen Susín, consejera de Bienestar Social y Familia del Gobierno de Aragón, el punto en el que se encuentra la implementación del Programa de Asistencia Material Básico (BÁSICO) y el nuevo modelo de tarjetas monedero para familias en riesgo de exclusión con menores a su cargo, que ha sido objeto de una comparecencia de la Consejera en las Cortes.
Se trata de un programa impulsado por el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, que a su vez ha acordado su gestión con Cruz Roja, vía Real Decreto, hasta que a 1 de enero de 2025 pase a ser competencia de las Comunidades Autónomas. En concreto, Aragón recibirá 1.127.264,82 euros para garantizar el funcionamiento del programa de mayo a diciembre de 2024, una cantidad que desde el Departamento de Bienestar Social y Familia consideran escasa.
“Hay muchas cuestiones técnicas que tienen que resolver desde los dos Ministerios implicados antes de poner en marcha el programa”, remarcaba Susín: “Lo que sí sabemos es que aproximadamente 30.000 personas en Aragón se van a quedar sin esta ayuda alimentaria y las correspondientes medidas de acompañamiento”, como las que se prestaban hasta ahora mediante los comedores sociales. “El Gobierno de Aragón ha hecho su trabajo y estamos ya analizando el diseño de la implementación del programa para 2025, pero los fondos son y seguirán siendo insuficientes”, ha añadido.
Susín ha anunciado que Aragón “y otras muchas CCAA” ya han instado al Ministerio competente a convocar un Consejo Interterritorial de Servicios Sociales extraordinario “para que aclare todas las cuestiones pendientes” y para solicitar “un sistema dual que permita atender a esos 30.000 aragoneses que se quedan fuera del sistema que esta izquierda ha diseñado”.
“La última reunión del grupo de trabajo creado por el Ministerio en el mes de abril se celebró el viernes pasado y todavía faltan muchas cuestiones por aclarar”, ha deplorado la consejera Susín. “A pesar de la desinformación, a pesar de la improvisación, a pesar del caos y a pesar del enorme problema que este sistema va a suponer para miles de aragoneses, Aragón tiene ya todo preparado”, pero ha explicado que la Comunidad no puede poner el programa en marcha “porque tenemos las manos atadas por el Gobierno de España”.
Durante su comparecencia este martes en la comisión Susín ha recordado que el Programa FSE+ de Asistencia Material Básica se basa en un sistema de provisión de tarjetas de compra o vales canjeables que permiten a las familias beneficiarias adquirir alimentos frescos y determinados productos básicos en caso de tener hijos menores de 16 años a cargo, pero que excluyen colectivos como el de las personas mayores solas, familias de otras tipologías o de origen migrante.
Además, las familias que potencialmente puedan acceder a las tarjetas deben acreditar unos ingresos inferiores al 40% de la mediana de la renta: “Eso ya supone, de entrada, que quedan excluidas todas las familias que reciben el IMV o una renta mínima de inserción”, ha lamentado ante los grupos parlamentarios.
Carmen Susín ha criticado las “numerosas improvisaciones y retrasos” por parte del Ministerio de Derechos Sociales y ha recordado que, aparte de España, sólo otros cuatro países se han adherido a este nuevo sistema de reparto: Finlandia, Estonia, Lituania y Rumanía. “Bajo este sistema se estima que sólo 70.000 familias en España van a recibir estas tarjetas”, destacaba Susín, y en Aragón se calcula que llegarán a un máximo de 700 familias, un escenario que desde el Gobierno regional se ha denunciado en reiteradas ocasiones y también de la mano de las entidades sociales en Zaragoza, Huesca y Teruel en las últimas semanas.
En Aragón esas 700 familias que tendrán acceso a estas tarjetas podrán realizar sus compras en 26 supermercados de la provincia de Huesca, 19 en la de Teruel y 142 en la provincia de Zaragoza, aunque 90 de ellos están en la capital. “Hay comarcas donde sólo hay un punto de compra”, señalaba la consejera Susín: “Muchas familias lo van a tener muy complicado, dadas las distancias y la vulnerabilidad”.
De acuerdo con las estimaciones realizadas hasta la fecha hay comarcas en las que sólo hay una, dos o tres familias susceptibles de recibir esa tarjeta: “¿Ustedes creen que realmente sólo hay dos familias vulnerables en la Litera, o en los Monegros, o una en el Matarraña, o en la Ribera Baja?”, se ha preguntado Susín.
“A las 700 familias aragonesas que se van a ver beneficiadas de este programa tampoco les salen las cuentas, puesto que tendrán que abastecerse con unas tarjetas que, en el mejor de los casos, contarán con unos fondos de 220 euros y, en el peor, de 130”, explicaba Susín, que se ha referido a la implantación como “un fracaso más del Gobierno progresista que no iba a dejar a nadie atrás”, que se suma al que ha rodeado la implantación del Ingreso Mínimo Vital.
“Gracias al Gobierno de Pedro Sánchez se va a recortar la distribución de alimentos en España para las personas necesitadas y eso va a provocar que se incrementen las colas del hambre, ésas que quieren ocultar”, ha concluido Susín en la comisión de Bienestar Social y Familia de este martes.