Educación, Universidad e Investigación
Lambán reactivará el Consejo del Futuro y 15 foros de pensamiento para reflexionar sobre el futuro de Aragón en el muindo
El Presidente de Aragón, Javier Lambán, ha avanzado la reactivación del Consejo del Futuro y la puesta en marcha de al menos quince foros de pensamiento para abordar, tanto la nueva etapa de la Comunidad que este año celebra el 40 aniversario de su Estatuto de Autonomía, como la contribución de Aragón a los retos nacionales e internacionales que se presentan.
Lambán propone 15 foros de pensamiento para afrontar la nueva etapa del autogobierno y su contribución al mundo
Lambán-reactivación del Consejo del Futuro para reflexionar sobre los retos mundiales
Lambán repasa los avances en financiación, becas e inversiones en la UZ
Lambán ha clausurado el acto académico de la Universidad de Zaragoza donde ha reparado en la fructífera e indispensable colaboración que mantienen el Gobierno de Aragón y la Universidad de Zaragoza desde la pasada legislatura que, lejos del enfrentamiento que mantuvieron en el pasado, ahora disfrutan de una relación de entendimiento y cooperación que ha redundado en un nuevo modelo de financiación para la Universidad que le aporta estabilidad, así como en más becas y ayudas a los estudiantes, tal como adelantó la consejera de Ciencia, Universidad y Sociedad del Conocimiento, Maru Díaz, el pasado martes tras el Consejo de Gobierno.
El presidente aragonés ha recordado que este año se celebra el 40 aniversario del Estatuto de Autonomía y que el autogobierno ha aportado avances a la Comunidad, donde se han liberado sus energías económicas, políticas, intelectuales, configurándose a sí misma. Y un factor determinante en el camino de esta historia de éxito ha sido, según Lambán, la Universidad de Zaragoza que alcanzó su autonomía, precisamente, tres años después, en 1985. Ambas instituciones han ido creciendo de forma acompasada y han llegado a este 40 aniversario a un momento “feliz”, pese a que la anterior etapa no fue precisamente un camino de entendimiento, lo que se tradujo en una reducción de más de 10 millones de euros y que este Gobierno recuperó y aumentó la financiación de la Universidad. Hoy se refleja un crecimiento presupuestario incontestable, pasando de los 150 millones de euros de 2015 a los más de 219 millones en 2022.
Pero además de pasado y presente, Lambán cree oportuno aprovechar el momento de celebración y valoración del autogobierno para avanzar en una nueva etapa. Y nada más oportuno que generar foros de debate para reflexionar sobre el papel que debe desempeñar Aragón, además de su responsabilidad en la cogobernanza de España. De la mano de la Universidad de Zaragoza se dispone a celebrar no menos de quince foros de pensamiento para abordar cuantas materias contribuyan al desarrollo de la Comunidad.
Además, este aniversario se enmarca en un momento de grandes cambios en el orden mundial que coloca a Europa a las puertas de una guerra en la vecina Ucrania. Algunas previsiones anteriores han resultado desacertadas y según Lambán es vital volver a repensar y aproximarse a nuevas ideas donde el papel de y desde Aragón puede ser útil. Con ese propósito ha anunciado que se retomará el Consejo del Futuro puesto en marcha la pasada legislatura y en el que se quiere involucrar a la Universidad de Zaragoza.
Acuerdo histórico
El nuevo Modelo Global de Financiación para el campus público aragonés aprobado esta misma semana en el Consejo de Gobierno, compromete 1.082 millones de euros para la institución académica hasta 2026. El acuerdo mejora en un 30% el modelo vigente y permitirá por primera vez al campus cubrir todos sus gastos corrientes en el horizonte de cinco años para una educación superior de calidad y futuro.
El nuevo modelo dará estabilidad y seguridad económica al campus público, ayudará a combatir la precariedad y reducir la temporalidad, consecuencia de los recortes sufridos en la crisis anterior, e impulsará a la Universidad como motor de la innovación y la economía del conocimiento en la que ha de sustentarse el futuro de Aragón.
Con esos retos, la transferencia básica crecerá de forma sostenida desde los 182,2 millones hasta alcanzar los 219,8 en 2026, incluyendo los complementos autonómicos para el Personal Docente Investigador. Una dotación expansiva y estable que permitirá implantar mejoras salariales para los colectivos más precarizados, como el profesorado asociado o los profesores ayudantes doctores; así como la reposición de profesorado en áreas de salud y otras áreas críticas, o la estabilización y adaptación de plazas del personal de administración y servicios. Y que garantizará los recursos necesarios para un funcionamiento de calidad, mediante la cobertura de todos los gastos corrientes.
Además de esa transferencia básica, el Gobierno de Aragón asumirá un plan de inversiones, a razón de 12 millones anuales, para contrarrestar la escasa inversión habida en infraestructuras desde la crisis de 2008. Se financiarán importantes obras de rehabilitación o en su caso de nueva construcción, dentro del programa Unizar 2030, que prevé una reforma integral de los campus para ganar espacios de socialización y de encuentro para el estudiantado, así como zonas verdes.
Aunque las obras se pactarán en el seno de la Comisión Mixta Gobierno de Aragón-Universidad, se priorizará la reforma de edificios en situación de deterioro, como la Facultad de Medicina o las clínicas de Veterinaria. Además, todas las actuaciones deberán conllevar una reducción significativa de la huella energética. De esta forma, se reforzará el compromiso con una universidad verde y amable con el medioambiente y se reducirán los costes derivados del consumo energético.
El modelo incluye también una apuesta clara por la investigación que se desarrolla en el campus público, como palanca indispensable para la transformación de Aragón y motor de futuro. En este sentido, el contrato programa de los Institutos de Investigación duplica su cuantía –de los 5,2 millones actuales a más de 10- con una senda creciente también a lo largo de los cinco años de vigencia del mismo.
Con esta dotación, que ayudará a acometer obras de mejora y equipamientos, así como otras actuaciones para el fomento de la investigación, el desarrollo y la innovación, se persigue reforzar la excelencia de unas instalaciones científico-técnicas en las que trabajan actualmente más de 1.200 investigadores.