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Viernes, 22 de noviembre de 2024

ServiciosSociales

Atención a las víctimas de violencia machista en Aragón

Violencia de Género

Una nueva aplicación informática agiliza la apertura de protocolos de violencia de género en las urgencias hospitalarias

27 Comarcas cuentan ya con un protocolo de coordinación comarcal para atender a las víctimas

El Ejecutivo autonómico y la Delegación del Gobierno ponen en marcha una nueva aplicación informática en los servicios de urgencias hospitalarias que mejora la comunicación de los posibles casos de violencia de género.

Mediante un correo electrónico automático la Policía Judicial recibirá desde los centros hospitalarios el informe que habitualmente se remite al juez cuando los responsables sanitarios detecten en pacientes posibles lesiones por malos tratos.

El correo electrónico que recibirá la Policía Judicial cumple con todas las garantías de seguridad e irá con una firma que garantizará que su origen es auténtico.

El mensaje se generará y enviará en el mismo momento en el que se proceda a la impresión del parte de lesiones y del informe médico en el que se reconozca una presunta violencia de género.

Puesto clínico hospitalario

Esta aplicación se ha creado en todas las urgencias hospitalarias que disponen del llamado Sistema de Información de Urgencias (PCH), una herramienta que permite el seguimiento de todo el proceso del paciente desde su ingreso en urgencias hasta el alta, traslado a otro centro o ingreso en el hospital. Además de interconectar los servicios sanitarios simplifica la burocracia que deben cumplimentar los pacientes o sus familias.

27 comarcas aragonesas cuentan ya con un procedimiento de coordinación para prevenir la violencia contra las mujeres

Los procedimientos de coordinación comarcal se han elaborado para garantizar el derecho a la asistencia integral de las mujeres víctimas de violencia en el territorio aragonés. Después de dos años de trabajo, 27 comarcas cuentan con un documento y una Comisión de seguimiento de la puesta en práctica de los protocolos, y el resto se encuentran en proceso de elaboración.

En todas las comarcas el trabajo comenzó con el impulso del Instituto Aragonés de la Mujer (IAM), que propuso a las corporaciones locales este proyecto para mejorar y profesionalizar los servicios de atención a la mujer, fomentar el trabajo en red y articular los recursos disponibles en las comarcas, lograr la sensibilización de todos y atender a las mujeres y evitar el deterioro que supone la violencia para las víctimas.

En un primer momento se realizaron acciones formativas dirigidas a todos los agentes implicados en las comarcas: Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, Sistema Sanitario, Educativo, Judicial y Servicios Sociales. Después se elaboró un diagnóstico de las características de la población y de los recursos con que contaba cada comarca para atender a las mujeres víctimas de violencia.

El objetivo ha sido el desarrollo de un trabajo en red para establecer unas rutinas y protocolos que faciliten la colaboración efectiva entre los profesionales de cada comarca, de manera que se incremente la eficacia de sus actuaciones cuando se produzca o se conozca una agresión. Este trabajo se ha realizado en todas las comarcas a través de una mesa técnica y la mayoría han concluido su trabajo con el resultado de los 27 protocolos de coordinación.

La coordinación interinstitucional mejora la atención a las víctimas de violencia

En diciembre de 2008 el Gobierno de Aragón, la Delegación del Gobierno, la FAMCP, el Colegio de Abogados de Aragón y la fiscalía firmaron un protocolo para garantizar una actuación coordinada de todas las administraciones implicadas en la persecución de los actos de violencia de género y en la asistencia a las víctimas. Actuaciones como la puesta en marcha de una aplicación informática para agilizar los procedimientos en las urgencias hospitalarias o de los protocolos de coordinación comarcal, desarrollan los acuerdos contenidos en aquel protocolo.

En objetivo de todas las actuaciones es mejorar en la prevención de la violencia y garantizar la atención a las víctimas