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Viernes, 22 de noviembre de 2024

ServiciosSociales

Un curso del Instituto Aragonés de Servicios Sociales forma a cerca de una veintena de mediadores gitanos

La iniciativa, financiada al 50% con fondos europeos, pretende promover la inclusión social y luchar contra la pobreza y cualquier forma de discriminación

Tras el curso se contratará a estos mediadores para que trabajen con el colectivo

El Instituto Aragonés de Servicios Sociales ha impartido un curso por el cual se han formado un total de 18 mediadores gitanos que trabajarán con su colectivo. La consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, ha asistido hoy a la sesión de clausura en la que los participantes han recibido los diplomas acreditativos.   La consejera ha dicho a las personas que han finalizado el curso que espera mucho de ellos y de su trabajo como mediadores para conseguir una verdadera inclusión de su pueblo en la sociedad.   Este curso, financiado al 50% por los fondos europeos, se enmarca dentro de la Estrategia Europa 2020 de “Apoyo a la inclusión social de la población gitana” desarrollado en la Estrategia Nacional.   Los objetivos finales del mismo son mejorar la cooperación y coordinación entre los diferentes agentes implicados en la inclusión social de la población gitana y, así, mejorar las condiciones de vida de la población gitana en áreas como la educación, el empleo, la vivienda y la salud.   El curso se ha desarrollado en la ciudad de Zaragoza y sus barrios rurales y ha sido impartido por la empresa AEBIA, que ha contado con la colaboración de la Federación de Asociaciones Gitanas de Aragón (FAGA), Secretariado Gitano y la Asociación de Promoción Gitana.   Este proyecto se divide en dos partes. La primera es un curso de 100 horas de formación en materias específicas relacionadas con la mediación. Las clases han versado sobre los factores sociales de riesgo, la mediación en los distintos ámbitos de actuación (familiar, escolar, comunitario, intercultural, vivienda, salud, empleo y justicia). Asimismo, profesionales de la Administración les han informado sobre los recursos existentes para cubrir las necesidades de la población con la que van a trabajar como mediadores. El curso incluye una parte práctica y el diseño de un proyecto de intervención.   La segunda parte es el desarrollo de un proyecto que fomente el acceso de la población gitana de nuestro territorio y población romaní procedente de otros países a todos los recursos, bienes y servicios mediante actuaciones de atención básica de mediación, siempre desde la perspectiva de la participación activa en itinerarios de inserción social.   De esta forma, se contratará a ocho mediadores y un trabajador social por un periodo de nueve meses, además de a un coordinador del proyecto durante quince meses.   Según los últimos datos disponibles del Estudio-Mapa sobre Vivienda y Población Gitana 2015 elaborado por la Fundación Secretariado Gitano, se estima que la población gitana en Aragón ascendía a 12.249 personas ese año, concentrándose en Zaragoza capital 5.707.    

Broto destaca la importancia de la labor de los mediadores gitanos