El IAM estrena una línea de formación en materia de igualdad para las empresas y entidades

El Instituto Aragonés de la Mujer (IAM) estrena este año una línea formativa en materia de igualdad laboral destinada a las empresas públicas y privadas y a aquellas entidades que quieran poner en marcha acciones que favorezcan la igualdad efectiva y real entre hombres y mujeres.   La directora del Instituto Aragonés de la Mujer, Natalia Salvo, considera que “es fundamental fomentar la igualdad entre hombres y mujeres en un ámbito tan importante como es el laboral” y añade que “es esencial que las mujeres tengan empleos de calidad y dignamente remunerados para favorecer su independencia económica y, por consiguiente, su emancipación y su libertad”.   La formación que oferta el IAM se pone a disposición de aquellas empresas, entidades o asociaciones que deseen implementar planes o medidas de igualdad. Podrán solicitarla aquellas que por ley estén obligadas a ello (las que tienen más de 250 trabajadores) y aquellas más pequeñas que también quieran poner en marcha medidas de estas características.   La formación tendrá una parte teórica en la que se impartirán nociones básicas sobre género e igualdad y se explicarán objetivos y finalidad de los planes y medidas de igualdad. También habrá una parte práctica en la que se enseñará cómo hacer un diagnóstico previo y la redacción, a partir de las conclusiones de este, de los planes de igualdad.   Esta línea formativa, que se llevará a cabo en las tres provincias aragonesas, está estrechamente ligada a las asesorías laboral y empresarial del IAM, que el año pasado atendieron a más de 3.000 usuarias.   Salvo recuerda que en el artículo 45 de la Ley Orgánica 3/2007 para la igualdad efectiva entre hombres y mujeres se establece que las empresas están obligadas a respetar la igualdad de trato y de oportunidades en el ámbito laboral. Para ello, deben llevar a cabo medidas efectivas dirigidas a evitar cualquier discriminación laboral entre hombres y mujeres, medidas que deben acordar con los representantes legales de los trabajadores.   En el caso de las empresas de más de 250 trabajadores, tienen la obligación de que las medidas de igualdad a las que se refiere el apartado anterior se dirigirán a la elaboración y aplicación de un plan de igualdad que deberá ser, asimismo, objeto de negociación en la forma que se determine por la legislación laboral.   Salvo insiste en que, con independencia del número de trabajadores, “las empresas deben desarrollar acciones encaminadas a favorecer la igualdad real y efectiva de las mujeres y hombres en el ámbito laboral”, algo, añade “para lo que el IAM les ofrece las herramientas”.