Economia en cifras
La tasa de inflación se sitúa en el -0,2% anual en febrero en Aragón
La inflación subyacente también es negativa, el -0,1% anual en febrero
De acuerdo con los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la inflación se redujo dos décimas en febrero tanto en Aragón como en España, de forma que registró una tasa anual del -0,2% en la Comunidad Autónoma y del 0,0% en el conjunto del país.
Por su parte, en la Eurozona la tasa anual de inflación en febrero fue del 0,8%, por tercer mes consecutivo, por lo que el diferencial favorable se vio ampliado hasta un punto porcentual en el caso de Aragón y ocho décimas en el promedio español.
Este dato fue el resultado de caídas anuales de precios en Aragón en la mitad de los doce grupos de consumo en que se desagrega el índice general de precios en combinación con aumentos anuales de precios muy moderados en los seis grupos restantes.
En comparación con el mismo mes del año anterior, se produjeron en Aragón sensibles descensos de precios en los grupos de consumo de comunicaciones (-6,8% anual), transporte (-1,9% anual) y ocio y cultura (-1,7% anual). De forma más moderada se redujeron los precios de menaje y medicina (-0,2% anual en ambos casos) y los de vestido y calzado (-0,1% anual).
En estas tasas negativas influyen varios factores. Con carácter general, el bajo tono del consumo de los hogares, y en particular la agresividad comercial de las compañías de telecomunicaciones y el comportamiento de los precios de combustibles y carburantes, favorecidos por un petróleo cuya cotización media en febrero fue de 109,1 dólares/barril en su calidad Brent, un 6,1% inferior a lo observado un año antes.
En el apartado de las subidas anuales de precios, las tasas en febrero eran muy moderadas en Aragón. La más elevada correspondía al grupo de consumo de bebidas alcohólicas y tabaco (2,2% anual), seguido de la enseñanza (1,4% anual) y alimentos y bebidas no alcohólicas (1,0% anual). Con tasas de inflación inferiores al 1% anual se situaban en febrero los grupos de consumo de otros bienes y servicios (0,7% anual), vivienda (0,6% anual) y hostelería (0,1% anual).
Por provincias aragonesas, la tasa anual de inflación en febrero era del -0,3% en Huesca y Teruel y del -0,2% en Zaragoza.
La inflación subyacente, que es aquella que elimina del índice general los alimentos no elaborados y los productos energéticos, quedaba en Aragón también en terreno negativo al anotar un -0,1% anual en febrero. Por su parte, en la eurozona la inflación subyacente en enero (último dato conocido) repuntaba una décima para quedar en el 1,0% anual.
Por comparación con el mes precedente, el índice general de precios no sufrió variación alguna en febrero en Aragón, al igual que lo que ocurrió en España. En la Comunidad Autónoma disminuyeron los precios de vestido y calzado (-1,1% mensual), efecto de la continuación en las rebajas, así como los precios de alimentos y bebidas no alcohólicas (-0,4% mensual) y hostelería (-0,1% mensual).
Estas disminuciones mensuales se vieron compensadas por los aumentos producidos en ocio y cultura (0,7% mensual), transporte y otros bienes y servicios (0,3% mensual en ambos casos), medicina y bebidas alcohólicas y tabaco (0,1% mensual en ambos casos). En los cuatro grupos de consumo restantes (vivienda, menaje, comunicaciones y enseñanza), los precios aragoneses en febrero no variaron respecto a enero.
En suma, el comportamiento reciente de los precios en Aragón y España se corresponde con la debilidad de la demanda, y es de esperar que en los próximos meses se anoten tasas de inflación cercanas a cero. No obstante, aunque pueda existir cierto riesgo de deflación, parece prematuro adjudicar dicha etiqueta a la economía española, toda vez que la incipiente recuperación del ritmo de actividad debería reconducir la inflación en el medio plazo hacia una senda de tasas positivas.
En su última reunión, celebrada el pasado jueves 6 de marzo, el Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo decidió mantener el tipo de interés en el mínimo histórico del 0,25%, así como el resto de tipos de interés y demás medidas de política monetaria. Ello provocó cierta decepción en los mercados, ya que se esperaba algún recorte o el anuncio de alguna nueva medida de apoyo a la liquidez del sistema, dada la baja tasa de inflación y la fortaleza del euro.
No solo la inflación actual se encuentra alejada del objetivo del BCE de situarse por debajo, pero cercana al 2% en tasa anual, sino que además las previsiones a tres años vista son de que la inflación en la eurozona permanezca muy por debajo de dicha cota.
Así, el BCE prevé una inflación del 1% en 2014, una décima por debajo de lo previsto hace tres meses (1,1%). Para 2015 espera que alcance el 1,3%, en línea con el anterior pronóstico, mientras que para 2016 ha anunciado dos previsiones. Confía en que alcance el 1,5% en el conjunto del año y sea del 1,7% en el último trimestre de 2016.