Turismo
Tres monasterios aragoneses para visitar
Aragón cuenta con varios monasterios por su extenso territorio. Algunos se han convertido en lugares de gran atractivo turístico, otros parecen haberse detenido en el tiempo, y los menos, sobreviven habitados por comunidades religiosas. Turismo de Aragón propone un recorrido por tres de ellos.
El conjunto monumental Real Monasterio de San Juan de la Peña sorprende por su ubicación privilegiada en un increíble espacio natural y por ser un compendio de estilos artísticos. El real monasterio medieval, está construido al amparo de una roca, y sobre ésta, en una pradera casi infinita, se ubica el monasterio barroco.
El monasterio benedictino del s. XII fue cuna del reino de Aragón y sus muros han custodiado el Santo Grial. Además, fue, panteón real de Aragón hasta el siglo XII. Declarado Bien de Interés Cultural, el monasterio está compuesto por varias dependencias pertenecientes a distintas épocas. A través del atrio accederás a la Sala de los Concilios y a la llamada iglesia baja, mozárabe del siglo X. El panteón de nobles conserva dos hileras de nichos decorados con arcos adosados de medio punto y friso ajedrezado de estilo jaqués. Desde allí se accede a la iglesia alta (s. XI) y al claustro (s. XII), maravilloso ejemplo del arte románico con una valiosa galería de capiteles tallados en los que se representan escenas bíblicas. Más información: www.monasteriosanjuan.com
La segunda propuesta: el Monasterio cisterciense de Santa María de Veruela en las faldas del Moncayo (Zaragoza). Es uno de los monasterios más bellos y mejor conservados del territorio aragonés y junto a los de Rueda y Piedra, forman el conjunto de cenobios cistercienses más representativos de la Comunidad
La construcción del conjunto se prolongó varios siglos, los edificios reúnen varios estilos artísticos que van desde el románico en la portada de la iglesia, pasando por el gótico en su interior y en el claustro medieval, el estilo renacentista en el Palacio abacial y el barroco en el monasterio nuevo.
Visita la sala capitular en la que aún se conservan las efigies talladas de algunos abades ahí sepultados; el comedor o refectorio donde uno de los monjes leía las sagradas escrituras y los demás escuchaban y comían en silencio. Conoce el Espacio Bécquer en la antigua cilla. Ahí, podrás saber más sobre el poeta Gustavo Adolfo Bécquer y cómo este lugar le inspiró para escribir sus "Cartas desde mi celda"; también los dibujos y acuarelas de su hermano Valeriano, basados en el Monasterio y sus alrededores. Más información: http://monasteriodeveruela.blogspot.com.es
Por último, comparte estancia con los monjes mercedarios que habitan todavía en el Monasterio de Nuestra Señora del Olivar en Estercuel (Teruel). Allí se puede descubrir los orígenes legendarios de este monasterio como ya escribió Tirso de Molina en su “Dama del Olivar”, una historia emocionante de bandoleros y señores tiránicos cuyo telón de fondo es la milagrosa aparición de la Virgen. Vive con su Comunidad los momentos del día, se puede comer en el refectorio monacal del s. XVII, y participar con ellos en la oración litúrgica.
Más información: www.monasterioelolivar.com
Más información: turismodearagon.com