APROBADO EL PROYECTO DE LEY DE VÍAS PECUARIAS DE ARAGÓN
El texto legal, promovido por el Departamento de Medio Ambiente, quiere reforzar la protección y puesta en valor de estas vías tradicionales, potenciando sus usos y dando mayores competencias a las comarcas.
El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy el proyecto de Ley de Vías Pecuarias de Aragón, a propuesta del Departamento de Medio Ambiente. El proyecto tiene como objeto ordenar y regular el uso de las vías pecuarias, asegurando su adecuada conservación.
La ley servirá para preservar y defender su integridad, así como garantizar, promover y fomentar el uso público de las mismas, tanto para facilitar el tránsito ganadero, como para otros usos compatibles y complementarios. La ley busca mantener las vías pecuarias como corredores naturales, la diversidad biológica, la presencia de flora ligada a estas áreas y el desplazamiento de las especies de fauna. Aragón cuenta con una extensa red de vías pecuarias, con un desarrollo superior a los 12.000 kilómetros y una extensión, aproximada, de 50.000 hectáreas.
Dentro del procedimiento de elaboración de la presente ley, se ha ofrecido audiencia a un amplio número de entidades, asociaciones y sindicatos, de forma que el texto definitivo se ha enriquecido con las aportaciones realizadas tanto de organizaciones agrarias y ganaderas, cámaras agrarias, federaciones de regantes, entidades locales, asociaciones de municipios, así como del Consejo de Protección de la Naturaleza y del Consejo de Cooperación Comarcal y de diferentes órganos y Departamentos del Gobierno de Aragón, lo que refleja el amplio proceso participativo realizado.
AGILIDAD Y DESCENTRALIZACIÓN ADMINISTRATIVA
La ley desarrolla potestades administrativas relevantes, como son la clasificación, el deslinde, el amojonamiento y señalización de las vías. Se incluye, para lograr una mayor agilidad, la posibilidad de acudir, una vez clasificada la vía, a un procedimiento abreviado en el deslinde. Una novedad destaca es que otorga a las comarcas la gestión y administración de las vías pecuarias de titularidad de la Comunidad Autónoma cuyo trazado discurra de forma exclusiva por el territorio comarcal sin solución de continuidad.
USOS Y VÍAS DE ESPECIAL INTERÉS
Según el proyecto, se podrán declarar como Vías Pecuarias de Especial Interés aquellas que contengan un destacado valor para la protección natural, cultural o turística. La declaración establecerá con carácter prioritario, su clasificación y deslinde y obligará a la elaboración de un plan de utilización que determine los usos preferentes y los complementarios, así como las medidas a adoptar para su desarrollo y fomento.
En todo caso, se declararán Vías Pecuarias de Especial Interés Natural aquellas que atraviesen o colinden con montes demaniales o espacios naturales protegidos. La ley establece los usos complementarios de las vías pecuarias, tales como el paseo, la práctica del senderismo, la marcha a caballo, el cicloturismo y otras formas de utilización o desplazamiento deportivo, siempre que respeten la prioridad del tránsito ganadero y no se realice sobre vehículos motorizados.
CONSEJO ARAGONÉS DE VÍAS PECUARIAS Y FONDO DOCUMENTAL
El proyecto de ley prevé la creación de un Fondo Documental de Vías Pecuarias de Aragón, como registro público en el que constarán, detalladas, todas las vías pecuarias de titularidad de la Comunidad Autónoma. El fondo deberá contener las copias, fotografías, microfilmes o microfichas, u otro medio de reprografía o tratamiento informático de los documentos, planos, antecedentes y, en definitiva, toda la información útil relativa a las vías pecuarias.
Así mismo, la ley prevé la creación, mediante reglamento, del Consejo Aragonés de Vías Pecuarias, nuevo órgano consultivo en la materia en el que participarán, como mínimo, representantes de la Administración de la Comunidad Autónoma de Aragón, de las comarcas aragonesas, de las cámaras agrarias, de las asociaciones de municipios, de las organizaciones profesionales agrarias y ganaderas y de las asociaciones cuyo fin sea la defensa del medio ambiente.
HISTORIA DE LAS CABAÑERAS
Las vías pecuarias o cabañeras, como se les denomina en Aragón, tuvieron una marcada importancia económica y social durante siglos, dadas las características de gran parte del territorio: Pirineo, Prepirineo y Sierras Ibéricas, con elevadas altitudes y extremada climatología. Los orígenes de estos desplazamientos de ganado se remontan a épocas prehistóricas, conservándose restos que prueban que las vías pecuarias fueron los primeros caminos y rutas peninsulares. Estos desplazamientos, para aprovechar más racionalmente los pastos de puertos o estivales y los invernales de cotas más bajas, fueron impulsados y controlados por asociaciones y organizaciones de ganaderos dedicadas a la protección del pastoreo apoyado en la trashumancia. Estas asociaciones tuvieron un carácter peculiar en Aragón, con la creación de instituciones como la Junta General de Ganaderos de las Montañas, Las Casas de Ganaderos, La Mesta de Albarracín y otras organizaciones como Consejos, Cofradías o Ligallos, que regían los movimientos de la trashumancia.
La disminución del censo de ganado lanar y, en general, de la ganadería extensiva; la modernización y agilidad de los nuevos transportes, el cambio de forma de las explotaciones, las dificultades de la vida de los pastores y los grandes inconvenientes que éstos encontraban en el traslado de los rebaños por aquellas rutas, han dado lugar a la desaparición y deterioro de muchos tramos de cabañeras.
Las vías pecuarias aragonesas más importantes pueden incluirse en tres grupos o sectores: Las que enlazan el Pirineo con el Valle del Ebro a ambas orillas del río; las que, desde Gúdar y Maestrazgo, descienden hacia Tortosa y Levante y las que desde Albarracín (Montes Universales) discurren hacia La Mancha, dehesas andaluzas y Levante.