Patrimonio Cultural
El artista José Miguel Abril expone en el Museo de Huesca “Sed fugit”, su obra más íntima y personal
La muestra, que se exhibe hasta el 24 de septiembre, se ha inaugurado hoy con la presencia del director general de Cultura y Patrimonio, Nacho Escuín.
El escultor y pintor alcañizano presenta una obra crítica hacia el hombre más oculto y autodestructivo, a la vez que hace un llamamiento a la vida
El Museo de Huesca acoge, desde hoy y hasta el 24 de septiembre, la exposición “Sed fugit” que reúne un total de 40 obras del artista alcañizano José Miguel Abril. El artista presenta en esta muestra, que se exhibe en el Salón del Trono, Sala de la Campana y Sala de Doña Petronila, su obra más íntima y personal, dialogando en sus dos vertientes plásticas, la escultura y la pintura, pero con un hilo temático común. Una obra crítica hacia el hombre más oculto y autodestructivo, sin dejar de mostrar un vitalismo incipiente.
José Miguel Abril explica la distribución de las obras que se exponen
El artista José Miguel Abril habla de Sed fugit
Nacho Escuín hace referencia a la exposición y al artista
"Para este proyecto se ha hecho una selección de obras ya existentes junto con otras nuevas, que se han realizado ex profeso, tratando de expresar, bajo el influjo de Goya, su particular visión de los desastres", ha explicado Abril. El título de la exposición hace referencia al concepto “tempus fugit”, el tópico latino que evoca el paso irremisible del tiempo, ya que es inaprensible, no puede detenerse ni hacerse retroceder.
Para el director general de Cultura y Patrimonio del Gobierno de Aragón, Nacho Escuín, la exposición “abre un nuevo diálogo entre el espectador y el artista a través de la escultura y a través de una obra que está basada en un principio filosófico que, de alguna manera, radica en la formación que tiene el artista y que nos hace reflexionar a todos sobre lo estático del mundo y sobre el tiempo, que va y que viene y que lo devora todo”.
A través de esta exposición, comisariada por Carlota Santabárbara, el Museo de Huesca “vuelve a reivindicarse como un centro en el que se dan cita todas las perspectivas estéticas e históricas con la exposición de un joven artista aragonés que, de alguna manera, refrenda que se trata de un museo que está a la vanguardia en el apoyo a los jóvenes creadores y, al mismo tiempo guarda en su interior lo mejor de la tradición y de la cultura de Aragón”, ha dicho Escuín.
El director general de Cultura y Patrimonio ha asistido a la inauguración de la exposición, en el Museo de Huesca, junto al artista José Miguel Abril; la comisaria de la muestra, Carlota Santabárbara; la directora del Servicio Provincial de Huesca, Olga Alastruey; y la directora del Museo, Ana Armillas.
“Sed fugit”
La muestra está compuesta por 40 obras, de las que 29 de ellas son pinturas en diferentes formatos y técnicas, que conviven con 11 esculturas en piedra, casi todas en alabastro de distintas tonalidades. La obra se distribuye en 5 series temáticas que engloban diferentes piezas y 7 esculturas independientes que hacen que la exposición se convierta para el espectador en un recorrido, en diversas dimensiones, muy colorido a base de impulsos y trazos.
Lo más inusual en una exposición de José Miguel Abril es la pintura, ya que la escultura es lo que le ha caracterizado durante años por tratar un material tan inusual como el alabastro, pero a la vez tan bello en superficie, que genera texturas y transparencias únicas. “La mezcla de escultura y pintura es una manera de dar espectáculo al amplio recorrido por las tres salas de la exposición”, ha añadido el artista alcañizano.
Encontramos en sus obras plásticas, un dominio del dibujo, de la figura, pero sorprende cómo en la pintura se muestra informalista plasmando su expresividad en su mayor exponente, tal vez una válvula de escape para la energía creadora que le mueve. La obra de Abril plasma la fragilidad de la existencia, la temporalidad, la rabia y el dolor. Así es la obra de este artista aragonés que conmueve, con la intención de transmitir todo su poder expresivo. Sus creaciones nos guían siempre de la mano de la emoción y la inquietud.
Se observa en toda su obra el tambaleo que produce la caducidad del ser, el final al que todos estamos abocados, expresado desde una fuerza expresiva que se proyecta desde las entrañas del artista, a la vez que expresa rabia y angustia, templándose finalmente en la calma más inquietante de las figuras más solemnes de la muestra. El hilo argumental se reduce a una serie de preguntas sin respuesta que son lanzadas al espectador a través de las formas pétreas y la materia pictórica.
A lo largo de su trayectoria profesional, Abril ha participado en un buen número de exposiciones y eventos relacionados con el arte. Sus obras expresan la versión trágica del hombre y su transformación, buscando siempre la máxima expresividad mezclando situaciones de misterio y abstracción. Destaca el uso de materiales como el alabastro o la piedra negra del basalto.
La exposición estará abierta al público hasta el día 24 de septiembre, de martes a sábados de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 20:00 y los domingos de 10:00 a 14:00.
De forma paralela a la exposición se ha organizado Conversaciones con la obra de José Miguel Abril, que permitirá al público acercarse a la obra del artista, y en la que participarán la comisaria de la exposición y el propio José Miguel Abril. La actividad se desarrollará el martes, 25 de julio y el jueves, 7 de septiembre, a las 18:30 horas en el Salón del Trono del Museo de Huesca. *Se adjuntan imágenes de la exposición, sonidos del director general de Cultura y Patrimonio y del artista José Miguel Abril, y el dossier con la información de las obras que se exponen