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Viernes, 22 de noviembre de 2024

Patrimonio Cultural

La Dirección General de Patrimonio restaura una de las pinturas murales de Goya de Aula Dei

El Nacimiento de la Virgen presentaba pequeñas pérdidas puntuales de la capa pictórica

La Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón ha acometido la reparación urgente de una de las pinturas murales al óleo sobre la vida de la Virgen y de Jesús que realizó Francisco de Goya entre 1772 y 1774 en la Cartuja de Aula Dei. De las once escenas pintadas por él se conservan actualmente siete, ya que cuatro se perdieron y fueron rehechas en 1903 por dos pintores franceses, los hermanos Paul y Amadée Buffet.   La escena del Nacimiento de la Virgen que ha precisado la intervención de urgencia se sitúa en el muro de la Epístola de la nave y mide 3,06 m de alto por 7,90 m de ancho. En el centro se sitúa el grupo principal de la composición, formado por las mujeres que atienden a la Virgen recién nacida, iluminada por un haz de luz procedente de su propio emblema sostenido por dos angelitos sentados entre nubes. A su lado aparece San Joaquín, su padre, apoyado en un bastón y junto al que se observa una figura de medio cuerpo. Este grupo se sitúa en una especie de porche de madera que precede a la estancia en la que se ve a Santa Ana sentada sobre la cama en la que acaba de dar a luz y acompañada por otras dos mujeres. Esta parte derecha de la pintura, prácticamente perdida, fue la que rehicieron los hermanos Buffet.   La composición, claramente tripartita y planteada sobre una grada para realzarla, se completa a la izquierda con un grupo de tres pastores de espaldas, con varas en la mano y vigilando sus rebaños bajo un cielo cubierto de nubes. Es en esta última zona, muy deteriorada e intervenida, donde se localizan los desprendimientos a tratar en esta actuación de urgencia.   Durante una visita de revisión periódica realizada recientemente, se observó la presencia de sales solubles cuya evolución en forma de eflorescencias ha originado pequeñas pérdidas puntuales en lo que en un principio parecía capa pictórica, en el ángulo superior izquierdo de la escena del nacimiento de la Virgen.   Localizado el origen de las patologías en las cubiertas, y determinado el deterioro puntual en el extremo izquierdo superior de la escena del Nacimiento de la Virgen, se ha ejecutado la reparación del foco de humedad y origen de las sales del muro que da soporte a las pinturas murales afectadas.   Una vez solucionado el origen del problema y verificado el paulatino secado del muro, se ha procedido a la intervención puntual del estrato pictórico afectado. Los trabajos han sido ejecutados por la empresa de restauración TRACER, con un presupuesto total de 7.247,90 euros.   La intervención, dirigida a la estabilización del estrato pictórico, ha consistido en la fijación de la policromía en peligro de desprendimiento, la eliminación mecánica de las sales solubles, la consolidación puntual del soporte mural ligeramente disgregado y la reintegración cromática de las faltas y pequeñas pérdidas, aplicando los mismos procedimientos y técnicas utilizadas en la última restauración.   La Cartuja de Nuestra Señora de Aula Dei fue declarada Bien de Interés Cultural, en la categoría de Monumento, en 1983. Su fundación se remonta a 1563, momento en que un grupo de monjes procedentes de la Cartuja de Nuestra Señora de Las Fuentes en Sariñena (Huesca) se trasladó a esta zona de la ribera del río Gállego buscando un emplazamiento más saludable. Este traslado se produjo bajo el auspicio del arzobispo de Zaragoza, don Hernando de Aragón, quien el 29 de febrero de 1564 bendijo el acto de colocación de la primera piedra de este monumental conjunto arquitectónico, que tardó más de dos siglos en adoptar su configuración definitiva.   Dentro del recinto monástico, entre otras edificaciones, destaca la iglesia de traza gótica tardía con elementos ya renacentistas, y en el interior de ella, lo que la convierte en excepcional, son las pinturas murales al óleo realizadas por Goya. Fueron realizadas al secco, es decir, al óleo aplicado directamente sobre el muro de yeso, y son un hito en la evolución pictórica del genio aragonés, ya que en ellas se observa la enorme influencia que ejerció el arte italiano en su obra tras el viaje de formación que realizó entre 1770 y 1771 a Italia.