Patrimonio Cultural
El Museo de Huesca prorroga la exposición “Le Jeu de Vivre” de la artista altoaragonesa Teresa Ramón
La muestra de la creadora galardonada con el Premio Aragón Goya 2015 podrá verse hasta el 4 de noviembre de 2018
Desde su inauguración el pasado 20 de abril han pasado casi 15.000 visitantes por el museo y se han programado distintas actividades como coloquios, talleres infantiles o visitas guiadas
Debido a la gran acogida de la exposición “Le Jeu de Vivre” de la artista Teresa Ramón, Premio Aragón-Goya 2015, instalada en el patio del Museo de Huesca, ésta se prorroga hasta el próximo domingo 4 de noviembre de 2018. Más de 14.900 visitantes han podido conocer de primera mano la obra de Teresa Ramón, el gran friso que recorre las paredes del patio octogonal del Museo en el que la artista ha sabido plasmar su particular universo lleno de significados y vivencias expresados a través del color. Durante estos meses se han programado visitas guiadas, coloquios sobre la obra y talleres infantiles.
Esta exposición organizada por el Gobierno de Aragón y comisariada por Rafael Doctor Roncero entronca con una de las líneas de actuación del Museo de Huesca, que es la puesta en diálogo de artistas contemporáneos con los espacios históricos del Museo de Huesca como son la Sala de la Campana, la Sala de Doña Petronila, el Salón del Trono y el patio como anteriormente ya han hecho artistas como Ignacio Llamas, José Miguel Abril, Antonio Fernández Alvira o Lina Vila.
Sobre Le Jeu de Vivre
En palabras del comisario Rafael Doctor, “es un cuadro como una vida, concebido con ilusiones, con momentos, con materia, con luz, con reposos, con sorpresas, con predicción, con sombras, con decepciones y aciertos, pero, ante todo, es un cuadro elaborado desde la belleza y libertad de la intuición de la autora; un cuadro de todo donde no es necesario ver nada e incluso es preferible no pensar y dejarse seducir y ser arrastrado por esa línea de luz de la vida y, sin esperar nada a cambio, sentir, sentir y sentir”. Y añade Doctor: “Lo que Teresa Ramón ha realizado para ser contemplado en este maravilloso patio del Museo de Huesca es ante todo una celebración, pues este gran cuadro es una invocación desde lo más profundo de ella misma que anhela ser compartido y sentido por todo aquel que lo contempla. Y ésta es la clave: es una obra en la que no hay nada de la autora que no esté en todo aquel que lo esté contemplando”.
Sobre Teresa Ramón
Nacida en 1945 en Lupiñén, Huesca.. Estudia en el IES Ramón y Cajal y de profesorado en la Escuela Universitaria del Profesorado de Huesca y Ciclo Superior de Italiano en la EOI de Huesca. En 1978 es becada por la DPH e invitada por el Instituto Italiano de Cultura al centro Experimental de Arte de Macerata (Ancona) y permaneciendo en la Escuela de Bellas Artes “Pietro Vannuci” de la Universidad de Perugia (Italia). Entre las numerosas distinciones y premios destaca: la Medalla de Plata de la V Bienal Internacional Ciudad de Huesca, 1982; Académica correspondiente de la Real Academia de Bellas y Nobles Artes, San Luis de Zaragoza, 1996; Primer Premio del X Concurso de Pintura Francisco Pradilla en Villanueva de Gállego, Zaragoza, 1997; Lazo de Dama de Isabel la Católica por méritos Artísticos y Docentes en 1997; Profesora invitada por la Universidad Altos de Chavón (asociada a la Escuela de Diseño Parsons de Nueva York) República Dominicana en 1999 y en 2007; Experta Universitaria en Arte y Formadora de Formadores de Didáctica de la Expresión Artística por la Universidad Complutense de Madrid, 1998; Artista invitada por el Gobierno de Marruecos al XXV Foro Internacional de Arte y Cultura en la ciudad de Asilah, 2003 y Premio Aragón Goya en el año 2015, Gobierno de Aragón.
Sus primeras exposiciones en Madrid y Barcelona, después de dos años de investigación con distintos materiales, son lacas sobre planchas de aluminio, técnica personal, por la que fue invitada a dar clases en la Universidad de Perugia, alcanzan un matiz surrealista que deriva hacia un realismo de connotaciones mágicas, que desembocan posteriormente en un concepto figurativo muy diferente pero que guarda un aroma de lo realizado entre finales de los setenta y ochenta. Exposiciones en Zaragoza, Barcelona, Madrid, año tras año, entre 1976 y 1989. En 1990, Pepe Ayllón teórico del grupo El Paso, selecciona una de sus obras de gran tamaño para la DPH, ese mismo año realiza la exposición “Bestiario” en la DPH, todo un bestiario representado de manera esquemática, intencionadamente primitivo, con la intención de potenciar ese tema con lo irracional como protagonista. Esta exposición que supone una arriesgada ruptura con su época anterior, tanto de materiales como de temática, y según la crítica es una gran apuesta por una Permanente Innovación, muy característica de su proceso creativo. Con posterioridad a 1993 la obra se puebla de elementos simbólicos ancestrales, formas antropomórficas y diferentes símbolos personales. La estancia en República Dominicana (Altos de Chavón) motiva un enriquecimiento del color y nuevas técnicas al fresco sobre lienzo llenas de luminosidad y frescura cromática y obras de singular abstracción como “Los amores amarillos” o “Música acuática” cambiantes atmósferas, espacios, planos y formas integradas con fluidez. En 2010 expone en La Lonja de Zaragoza su obra pictórica “Desiertos y Cardenales” y los vídeos “Monegros-Nueva York” en torno a las soledades naturales o cosmopolitas.
Su vínculo con la provincia altoaragonesa es muy profundo, realizando grandes obras como el mural “Catarsis” 2002, entrada del túnel internacional de Somport o “La ciudad dorada” 2008 en el Palacio de Congresos de Huesca. Además de las esculturas “La puerta de Aragón” en Fraga (Huesca) y “Petronila y las águilas” en la autovía Huesca- Lérida. Ambas esculturas monumentales, realizadas en acero corten y acero inoxidable. Ha impartido cursos de Arte en diversas instituciones culturales, educativas y universitarias en España y diversos países de Europa y América.