SE ABREN AL TRÁFICO LOS TÚNELES DE OBARRA Y NUÉVALOS TRAS UNA INVERSIÓN APROXIMADA DE 400 MILLONES DE PESETAS
Zaragoza 30/3/1999. (J.L.A.) La Dirección General de Carreteras del Gobierno de Aragón abrirá al tráfico los túneles de Obarra, en la provincia de Huesca, y Nuévalos, en Zaragoza, después de llevar a cabo en los últimos meses trabajos para su restautación por un importe cercano a los 400 millones de pesetas.
Tres de los siete túneles de Obarra, en la carretera A-1605, de Graus al Valle de de Arán, presentaban un grave peligro de desprendimientos y estabilidad. Estos túneles tienen una longitud de 50,24 y 77 metros, respectivamente.
Los primeros trabajos consistieron en el saneo de los túneles y una estabilización a base de hormigón proyectado con fibra metálica. A continuación, se procedió a la excavación de los tres túneles hasta alcanzar un ancho de 8,11 metros con el fin de conseguir un plataforma final de 7,45 metros. Posteriormente, se realizaron anclajes de sujección mediante bulones de accero de 3,5 metros de longitud y 25 milímetros de diámetro. Por último, utilizando como encofrado cerchas y placas de acero, se llevó a cabo el hormigonado de los túneles y posterior revestimiento del pavimento interior con hormigón proyectado.
Se han realizado también los trabajos de drenaje, construcción de aceras y reposición del pavimento. Dado, por otra parte, el peligro de desprendimientos en la ladera del tramo de carretera que une los dos primeros túneles, se ha construido un falso túnel que los une. La longitud resultante de los túneles tras la realización de estos trabajos es del 265 metros y la inversión total ha superado los 250 millones de pesetas.
El túnel de Nuévalos se encuentra en la carretera A-2503 y la obra ha supuesto el refuerzo del túnel, de 145 metros. Los trabajos realizados se basaron en una primera limpieza y proyectado de una capa inicial de hormigón proyectado sobre la que se colocó un mallazo electrosoldado de 6 milímetros de diámetro para posteriormente colocar diez bulones.
En el túnel se colocaron cerchas de tipo Pantex, otra capa de mallazo y nuevo proyectado de hormigón para acabar la sección con un espesor de 24 centímetros. Se han efectuado también excavaciones y el hormigonado de la contrabóveda para ajustar la rasante y adaptar el galibo existente. Los trabajos han sido ejecutados en el plazo de dos meses y medio y han supuesto una inversión de 130 millones de pesetas.
En el túnel sólo quedan de ejecutar los trabajos en una solera, que se efectuarán posteriormente a las fechas de Semana Santa, final de obra que llevará aparejado el cierra al tráfico durante tres o cuatro días.