Escolarización
Gobierno de Aragón y Ministerio de Medio Ambiente invertirán 2 millones de euros en actuaciones de desarrollo sostenible en la Reserva de la Biosfera de Ordesa-Viñamala
La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, el consejero de Medio Ambiente, Alfredo Boné, y el consejero de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes, Javier Velasco, han firmado hoy convenios para potenciar la Red de Caminos Naturales de Aragón, peato
La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, y el consejero de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, Alfredo Boné, han firmado hoy un convenio de colaboración para el desarrollo de actuaciones de desarrollo sostenible en la Reserva de la Biosfera Ordesa-Viñamala. Las actuaciones, que contarán con un presupuesto de 2 millones de euros, permitirán compatibilizar los objetivos de conservación con los de desarrollo socioeconómico del territorio. Además, junto con el consejero de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes, Javier Velasco, se ha suscrito otro convenio para potenciar la red de caminos naturales no motorizados.
ACTUACIONES EN ORDESA-VIÑAMALA
Las actuaciones objeto de este convenio se centrarán en la peatonalización de los accesos al Cañón de Añisclo y en la mejora del abastecimiento y calidad de las aguas en los municipios ubicados en el ámbito territorial de la Reserva de la Biosfera Ordesa-Viñamala, en especial en aquellos que vierten sus aguas residuales a los cauces ubicados en el ámbito del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
El Gobierno de Aragón aportará la mitad del presupuesto, mientras que la Secretaría General para el Territorio y la Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente y la Confederación Hidrográfico del Ebro aportarán 500.000 euros, respectivamente.
AMPLIACIÓN DE LA RESERVA DE LA BIÓSFERA
La Reserva de la Biosfera Ordesa-Viñamala fue declarada por la UNESCO en 1977. Con una extensión de 51.396 hectáreas, ocupa los territorios de la antigua Reserva Nacional de Caza de Viñamala y la delimitación inicial del Parque Nacional de Ordesa (antes de que el Parque se ampliara en 1982), en las comarcas del Alto Gállego y Sobrarbe.
El Gobierno de Aragón, a través del Ministerio de Medio Ambiente, ha solicitado la ampliación de la Reserva de la Biosfera para que abarque todo el actual Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, en unas 5.000 hectáreas, para que incluya toda la zona de Añisclo.
En la actual Reserva se distinguen dos sectores bien diferenciados: el occidental y el oriental. El primero, en pleno Pirineo axial, está constituido por el Valle de Tena hasta el río Gállego, en su orilla izquierda. El segundo, drenado por el río Ara y su afluente el Arazas, se encuentra asentado sobre el sustrato calcáreo de las Sierras Interiores Pirenaicas.
La variedad, singularidad y representatividad de los biotopos de alta y media montaña presentes en este espacio fue la principal razón que condujo a su protección con esta figura. La Reserva de la Biosfera Ordesa-Viñamala representa un valor natural de primer orden que tiene un papel importante en el desarrollo socioeconómico de los municipios que forman parte de ella.
Los núcleos habitados son una parte fundamental del territorio, al existir durante generaciones una fuerte interdependencia entre la actividad rural y el valor natural y paisajístico que se puede observar en la actualidad. La actividad rural llevada a cabo durante generaciones debe mantenerse en términos adecuados para lograr la conservación de los ecosistemas que son la base de la declaración de la Reserva de la Biosfera.
PUESTA EN VALOR DE LA RED DE CAMINOS NATURALES
Por otro lado, se ha firmado un protocolo de cooperación entre el Ministerio de Medio Ambiente y el Gobierno de Aragón, a través de los Departamentos de Obras Públicas, urbanismo y Transportes, y Medio Ambiente, para llevar a cabo diferentes actuaciones en los caminos naturales promovidos en Aragón, dentro de la Red de Itinerarios Naturales de Interés Nacional.
Desde 1993, el Ministerio de Medio Ambiente viene desarrollando un programa de infraestructuras ambientales que busca reutilizar las vías pecuarias, definiendo nuevos usos compatibles con los prioritarios que establece la normativa. El establecimiento de estos caminos naturales permite, asimismo, aprovechar senderos a lo largo de las riberas de los ríos, los antiguos canales de transporte, las cañadas, cordeles y veredas, los trazados de los antiguos ferrocarriles y carreteras abandonadas.
Con ella, se pretende dotar al Estado de una Red de Itinerarios de Interés Nacional. Esta Red permitirá facilitar el acceso de la población al entorno natural, disponer de itinerarios conectados de gran longitud que articulen en territorio de forma equilibrada y sostenible así como mantener y conservar los recursos patrimoniales y culturales existentes.
A través del convenio, el Gobierno de Aragón se compromete aportar el suelo necesario para la ejecución de los caminos, garantizar financiación para la ejecución de los proyectos durante un periodo mínimo de diez años y a tramitar un catálogo inventariado de la red existente, que establezca criterios de protección y proponga itinerarios de aproximación de los núcleos más importantes de población.