Economía
Rolabo ampliará sus instalaciones de Malpica y creará 32 nuevos puestos de trabajo
La compañía dedicada a la fabricación de principios activos para la industria farmacéutica Rolabo Outsourcing va a ampliar sus instalaciones productivas del polígono industrial de Malpica, en Zaragoza. Así lo han explicado sus responsables –encabezados por Gisele Butelman, en representación de la propiedad; Alejandro Sureda, director general y Federico Junquera, director de la planta- al consejero de Industria e Innovación del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga, que ha visitado la factoría.
Aliaga comenta la inversión de Rolabo
Aliaga explica que es Rolabo
“Ésta es una empresa modélica, un proyecto nuevo de inversión en alta tecnología en Aragón, con más de 15 millones de euros de inversión, empleo, y en un sector de componentes activos para la industria farmacéutica, donde hay un serio proceso de innovación continua. Estamos muy satisfechos de que haya empresas que proyectan una gran imagen de que haciendo investigación y desarrollo se puede acceder a mercados de más de 30 países”, ha afirmado el consejero de Industria e Innovación.
Arturo Aliaga ha señalado, en referencia a las inversiones de esta planta, que es “una inversión que voy a llevar al próximo Consejo de Gobierno para declararla de Interés Autonómico. Que ya se ha iniciado las fases de la parte del proceso más dedicada a la investigación y que pasamos a la producción industrial de nuevos principios activos, abriéndose la empresa camino en una parte más biotecnológica”. Por eso, ha querido también agradecer a la empresa la buena disposición para permanecer en nuestra Comunidad y fomentar el tejido industrial en esta zona y ha “felicitado al equipo directivo y a la propiedad por decidir que esta inversión se haga aquí en la planta de Zaragoza”.
Esta ampliación permitirá a Rolabo Outsourcing abordar la obtención de moléculas altamente activas desde el punto de vista farmacológico pero mediante procedimientos biosintéticos, introduciendo así una nueva línea de actividad biotecnológica. El objetivo es la fabricación de inmunosupresores de última generación –algunos de ellos con propiedades anticancerígenas- utilizando procesos fermentativos a través de bacterias. Se trata de un campo de gran complejidad con procesos al alcance de muy pocas empresas, en el que los productos se caracterizan por tener un elevado valor añadido.
El proyecto, que nace con vocación exportadora a mercados regulados, lleva aparejada una importante inversión que rondará los 15 millones de euros. La puesta en marcha de las nuevas instalaciones está prevista para finales del primer trimestre de 2015, con una capacidad fermentativa de 32.000 litros, el apoyo de 3 laboratorios para el análisis, investigación, desarrollo, mejora y mantenimiento de cepas y otro laboratorio de I+D con 6 biorreactores de 6 litros y uno de 16.
Unas 100 personas de distinta cualificación trabajarán en el diseño, ingeniería, instalación y puesta en marcha de estas nuevas instalaciones, que generarán 32 nuevos puestos de trabajo directos, los correspondientes al personal de alta cualificación que se ocupará de la investigación y desarrollo de nuevos procesos, así como de la gestión de la producción. Los puestos indirectos se situarán en el entorno de los 130, de acuerdo con los datos de la organización empresarial del sector, FEIQUE.
Con este nuevo proyecto, Rolabo sigue avanzando por el camino de la especialización y se sitúa a la vanguardia de un campo puntero como el de la biotecnología, aumentando su competitividad, fortaleciendo el tejido industrial de la zona y revitalizando con ello el mercado laboral.
Rolabo, en constante crecimiento desde 1994
Rolabo Outsourcing S.L. es una compañía dedicada a la fabricación de principios activos para la industria farmacéutica cuya actividad abarca tanto producción propia como fabricación para terceros.
El origen de la empresa se remonta a noviembre del año 1.994, fecha en la que se constituyó la sociedad ROLABO, S.L. para la comercialización de productos químicos para la industria farmacéutica, veterinaria y cosmética. Poco después, en octubre de 1.995, se procedió a la compra de la planta de fabricación de ingredientes activos farmacéuticos, instalada sobre una extensión de 30.000 metros cuadrados que SmithKline&Beecham poseía en el polígono industrial de Malpica en Zaragoza y cuyas instalaciones databan de 1.982.
Desde entonces la empresa ha venido ejerciendo su actividad marcada por una constante inyección de inversiones en aras de dotar a la compañía de las más modernas instalaciones, que se han traducido en un crecimiento sostenido y continuo a lo largo de los años, apostando de forma determinante por la investigación, desarrollo e innovación (I+D+i), componente fundamental y de vital importancia que marca la competitividad en el sector químico farmacéutico. Así, se ha pasado de los 2.000 metros cuadrados originalmente construidos y los 2.500 litros de capacidad de reacción iniciales hasta los 11.400 metros cuadrados y 61.000 litros de reacción actuales. Esta expansión se ha contextualizado dentro de un marco de crecimiento sostenible, respetuoso con el medio ambiente, y dotando a las instalaciones de un soporte tecnológico avanzado, materias que han sido siempre una preocupación constante y también un acicate para la mejora continuada.
Toda esta inversión en instalaciones no hubiera tenido sentido sin la correspondiente inversión paralela en recursos humanos, que han pasado de los 17 empleos directos de 1.995 a los cerca de 80 actuales, a los que hay que añadir entre 20 y 30 puestos indirectos a través de servicios externalizados. Baza fundamental del crecimiento ha sido la consolidación de un equipo humano altamente cualificado, de forma que cerca de un 40% del personal posee formación universitaria y el resto son técnicos especializados.
La calidad es otro de los puntales sobre los que se asienta la compañía. Desde el comienzo han tomado las medidas necesarias para formar parte de los círculos de calidad más exigentes en el mundo y que se encuentran gobernados por los estándares de calidad GMP (Normas de Correcta Fabricación - NCF). En este sentido Rolabo ha sido acreditada por los organismos regulatorios oficiales de todos los países a los que vende, tanto en el ámbito europeo como en el resto del mundo, habiendo superado con éxito inspecciones de los organismos oficiales de inspección del gobierno norteamericano (FDA) y español (AEMPS), las más recientes en febrero de 2014 y mayo de 2012 respectivamente. Además, la empresa es sometida a entre 10 y 20 auditorías anuales por parte de clientes de diferentes países.
Actualmente, Rolabo posee un catálogo propio de más de 20 productos (antihipertensivos, antihistamínicos, antimaláricos, analgésicos y antieméticos entre otros), muchos de elevado valor añadido. Exporta a más de 30 países y tiene una cartera de más de 50 clientes repartidos por todo el mundo, entre los que se encuentran las compañías farmacéuticas más importantes. Por otra parte dispone de un potente soporte en I+D que se ha materializado en varios proyectos de “contract manufacturing” para terceros.
Con los años, Rolabo se ha convertido en una empresa puntera en el sector, con una amplia experiencia en el mundo de la química fina, dentro de una variada gama de reacciones químicas, y en el desarrollo de procesos de síntesis hasta escala industrial, gracias en gran parte a su eficiente equipo de profesionales. Hoy esta empresa puede ofrecer productos y servicios con la garantía de los más altos estándares de calidad (GMP), así como soluciones personalizadas tanto para compañías de productos genéricos y de marca como en el campo del desarrollo de procesos, el desarrollo analítico, el escalado y la optimización de procesos, con el soporte documental y regulatorio necesario de acuerdo a los requerimientos de las agencias oficiales del medicamento de los distintos países del mundo.
Las administraciones públicas han acompañado a Rolabo en los diferentes momentos de este gran proyecto empresarial, lo que ha servido de apoyo y motivación para seguir madurando. Entre ellas el Ministerio de Industria, Energía y Turismo con sus planes de competitividad en sectores estratégicos, los distintos ministerios a través de los que se ha gestionado la investigación, el desarrollo y la innovación en España y, en concreto, el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), las Áreas de Industria y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Zaragoza.