El Instituto de Medicina Legal de Aragón se moderniza para convertirse en un centro de referencia nacional
El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy un Plan Estratégico para su modernización que introducirá las innovaciones tecnológicas que requiere el siglo XXI
Desde este año y hasta 2019 este Instituto experimentará una mejora de sus medios y de sus técnicas, para seguir contribuyendo al asesoramiento de los órganos jurisdiccionales y para favorecer la investigación y la docencia
El Instituto de Medicina Legal de Aragón (IMLA) realiza pruebas periciales médicas, tanto tanatológicas -disecciones de cadáveres o autopsias- como clínicas y de laboratorio, además de actividades de docencia e investigación relacionadas con la medicina forense. El Consejo de Gobierno que se ha celebrado hoy ha aprobado su plan de modernización, para que siga estando a la altura del nivel científico y técnico que demanda hoy en día la sociedad.
Se trata de un plan estratégico que prevé someter al IMLA a un proceso de innovación desde este año y hasta 2019. Se pretende con ello aplicar, con rigor científico, los grandes avances de las nuevas tecnologías a la Ciencia Forense. Así, se establece como uno de los ejes fundamentales de este plan la implementación de técnicas de valoración biomédicas tecnológicamente avanzadas en la medicina legal, en la psicología forense y en otras ciencias forenses.
Con todo ello, el Instituto de Medicina Legal de Aragón se convertirá en un referente autonómico, ya que se creará la unidad de neurociencia forense, la de biomecánica en valoración del daño corporal y la de radiología e imagen digital. Para ello, se llevarán a cabo, entre otras, las siguientes medidas:
-Move-Human-sensors
El sistema de captura de movimiento denominado Move-Human-sensors se incorpora en el ámbito pericial de medicina forense. Es una técnica objetiva de valoración que se puede aplicar al daño corporal, a la discapacidad o a las problemáticas laborales. Se realiza gracias a la colaboración que existe con el I3A, el Instituto de Investigación en bioingeniería de Aragón, dependiente de la Universidad de Zaragoza.
Está basada en sensores que permiten conocer parámetros biomédicos del movimiento humano de la columna cervical y de las extremidades superiores, con las que se pueden realizar gráficas para los informes periciales. Proporciona datos objetivos y precisos de cada una de las articulaciones analizadas. Éstas se recogen en un registro matemático y gráfico que se compara con unas guías para evaluar las deficiencias.
Uno de sus campos de aplicación más importante es la valoración exacta de las secuelas producidas por un accidente de tráfico.
-P300 Y N400
Las pruebas P300 y N400 son dos pruebas de neurociencia forense que ya se practican en el IMLA para intentar aportar datos en la resolución de casos criminales, como asesinatos. Aragón es la primera comunidad autónoma española que tiene instalada una máquina que realiza este tipo de pruebas.
La P300 –Potencial Evocado Cognitivo- estudia el registro de la actividad del cerebro del paciente mediante una máquina y un ordenador que proyecta imágenes. El cerebro emite impulsos eléctricos en 300 milisegundos que se pueden identificar. La N400 estudia las señales negativas a los 400 milisegundos que el sujeto emite cuando se le presentan una serie de estímulos. Las dos se complementan, ya que una analiza la reacción a un estímulo y la otra se activa si algo falla.
Con estas dos pruebas, se colabora con la policía en la búsqueda del “conocimiento culpable” gracias al estudio de estas señales. El IMLA puede convertirse en referente pionero nacional de estas técnicas para la Medicina Legal y Forense.
-Fotogrametría, morfometría, radiología digital, escáner 3D
Se trata de aplicar técnicas de imagen y radiología digital a la ciencia forense. Se desarrollan con ello las técnicas en 3D con fotogrametría -una técnica de medición de coordenadas 3D, también llamada captura de movimiento- y el escaneo 3D, especialmente en el Servicio de Patología Forense.
Ya se ha empezado a trabajar en este campo y los resultados se han presentado en los juzgados como prueba pericial. Han aportado criterios objetivos, por lo que han sido útiles para el dictamen de sentencias.
La morfometría permite identificar a cadáveres con gran rapidez y fiabilidad.
La radiología de cadáveres es útil para valorar las lesiones traumáticas de los cadáveres que se encuentran en un estado que el examen externo ya no proporciona información.
Ahora, con este plan de modernización, se pretende adquirir un módulo de digitalización que permita exportar las imágenes obtenidas en formato digital para su presentación como prueba en los procedimientos. Con ello se gana en inmediatez, seguridad y se reducen costes.
-Implantación de un plan de actuación para catástrofes y accidentes con víctimas múltiples
Es el protocolo de actuación de todas las instituciones que intervienen en una situación así. Incluye, por ejemplo, a las Fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, la Unidad Militar de Emergencias o Protección Civil.
-Nuevos equipos informáticos y herramientas
Dotar de nuevos equipos informáticos y facilitar el acceso a programas y herramientas especializadas, como el operativo Orfila, base de datos desarrollada por el Ministerio de Justicia para los Institutos de Medicina Legal.
-Acreditar al IMLA como unidad docente e investigadora.
Se busca que este Instituto colabore en procesos de formación de pregrado y postgrado, para mejorar la calidad de los futuros profesionales.
En este Instituto trabajan, además de médicos forenses, psicólogos, trabajadores sociales, técnicos facultativos, técnicos de laboratorio, funcionarios de la administración de justicia de auxilio, de tramitación y de gestión, auxiliares de autopsia, personal subalterno y personal de seguridad.