La malnutrición del paciente hospitalario conlleva procesos de recuperación más largos y complejos
El 70% de los pacientes inicialmente malnutridos presentan un deterioro mayor a lo largo de su periodo de ingreso
Entre el 30% y el 50% de los pacientes presentan malnutrición durante su estancia hospitalaria, dependiendo del tipo de patología o del hospital del que se trate, y hasta el 70% de los pacientes inicialmente malnutridos muestran un deterioro mayor a lo largo del ingreso. Las consecuencias nocivas para la salud que se derivan de esta circunstancia son una mayor prevalencia de las infecciones, el retraso en la cicatrización de heridas o alteraciones gastrointestinales, lo que conlleva un aumento de la mortalidad y morbilidad, estancias hospitalarias más prolongadas, con períodos más largos de recuperación y, en definitiva, un aumento del coste económico.
Estos datos han sido aportados durante la presentación del Manual de recomendaciones nutricionales al alta hospitalaria, una publicación en la que ha participado un equipo de expertos en Nutrición Clínica, en colaboración con 62 especialistas oncólogos, geriatras, neurólogos, coordinados por Miguel León, secretario de la Sociedad Española de Nutrición Parenteral y Enteral y médico endocrino especialista en Nutrición del Hospital Doce de Octubre de Madrid, y Sebastián Celaya, especialista en Medicina Intensiva y director gerente del Hospital General Royo Villanova de Zaragoza. Se trata del primer volumen de estas características que se edita en nuestro país, y está concebido como un compendio de las recomendaciones nutricionales que deben seguir los pacientes de numerosas patologías, con el objetivo de proporcionar al especialista y al paciente la información nutricional adecuada que en función de su patología debe adoptar una vez que obtiene el alta hospitalaria.
En opinión de Sebastián Celaya, en los últimos años el desarrollo de la Nutrición Clínica como tratamiento de apoyo de los pacientes hospitalizados ha cobrado gran interés, y numerosos grupos de expertos han llevado a cabo diferentes estudios sobre este asunto. Sin embargo, "no había hasta la fecha ningún estudio en el que se pusiera de manifiesto una continuidad entre la nutrición que, a manos de los servicios de los diferentes centros hospitalarios había recibido el paciente, y las recomendaciones que escuchaba una vez recibida el alta voluntaria, y volver a un ambiente familiar en el que muchas veces no se sigue la alimentación más adecuada en función del tipo de patología".
Planteado este objetivo, "los especialistas que han participado en la obra han elaborado un manual práctico", tal como ha detallado Miguel León, quien ha informado de que "cada uno de los capítulos, que se distribuirá a los especialistas en formato CD-ROM, contiene una parte científica de carácter teórico en la que se exponen los conocimientos actuales sobre cada una de las enfermedades abordadas y se describen unas recomendaciones nutricionales dirigidas a un especialista que no es experto en Nutrición y que, por lo tanto, no dispone de todo el fundamento teórico necesario para aconsejar a su paciente sobre cómo ha de nutrirse. En segundo lugar, figuran las recomendaciones que se entregarán a cada paciente en el momento de abandonar el hospital diseñadas a modo de dietas y adaptadas a las necesidades que genera su patología de base.
Al tratarse de un manual dirigido no sólo a especialistas sino también a pacientes, otro de los elementos que ha cobrado especial importancia ha sido la legibilidad de los textos. Sebastián Celaya ha explicado que el lenguaje usado por los médicos resulta, en muchos casos, "difícilmente comprensible para los pacientes". Por ese motivo, "no sólo se ha cuidado mucho el lenguaje utilizado en las partes de la obra dirigidas al paciente, sino que el profesor Eduard Sanahuja, experto lingüista del Departamento de Didáctica de la Lengua y la Literatura de la Universidad de Barcelona, ha revisado la obra y pretendido ofrecer unos mensajes nítidos y eficaces, con el objetivo de mejorar el nivel de la educación sanitaria de nuestro país".
El doctor Celaya ha destacado que con este manual "se conseguirá también concienciar al personal sanitario de la importancia de cuidar el estado nutricional del enfermo". Para ello, "al igual que para restaurar otras funciones del organismo se dispone de antibióticos, o de nuevos fármacos o técnicas quirúrgicas, también en este área contamos con alimentos naturales o con suplementos nutricionales y dietas específicas, diseñadas por la industria, tanto para su administración por vía oral como por vía enteral o parenteral". Según ha destacado este experto "en este momento disponemos de todo un verdadero arsenal para reponer las necesidades nutricionales del organismo, por lo que el personal sanitario puede y debe estar convencido de que el estado nutricional del paciente es primordial para que la evolución de la enfermedad sea la adecuada".