Interior
La creación de los Colegios de Ingenieros e Ingenieros Técnicos en Informática, a las Cortes
El Consejo de Gobierno da aprueba por razones de interés público ambos proyectos de ley, elaborados a instancias de las respectivas asociaciones profesionales, que ahora pasan a tramitación parlamentaria.
El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy sendos proyectos de ley de creación de los colegios profesionales de Ingenieros y de Ingenieros Técnicos en Informática de Aragón, una vez acreditado su interés público durante la tramitación administrativa previa. Ambos textos legislativos se remitirán ahora a las Cortes de Aragón para su tramitación parlamentaria por el procedimiento legislativo común.
La iniciativa de la creación de estos colegios nació de los propios colectivos profesionales; la Asociación de Ingenieros en Informática de Aragón y la Asociación de Ingenieros Técnicos en Informática de Aragón, las dos por considerarlo necesario para ordenar el ejercicio de la actividad y favorecer la función social de estos profesionales, alegando la concurrencia de razones de interés público.
Un interés que, para el Ejecutivo aragonés, ha quedado acreditado durante la tramitación administrativa previa, con la consulta pública, diversos informes técnicos y jurídicos del propio Gobierno y la información pública y audiencia a los interesados.
La disciplina académica de informática, configurada actualmente como enseñanza universitaria, nació en 1969 con la creación del Instituto de Informática, dependiente del Ministerio de Educación y Ciencia. Los estudios de informática fueron evolucionando hasta que, en cumplimiento de la Ley de Reforma Universitaria de 1983, se publicaron en 1990 tres reales decretos por los que se establecían los títulos universitarios oficiales de Ingeniero en Informática, Ingeniero Técnico en Informática de Gestión e Ingeniero Técnico en Informática de Sistemas.
Tras la llegada del Espacio Europeo de Educación Superior en 2009, los títulos de Ingeniero e Ingeniero Técnico dan paso a los nuevos títulos de Grado y Máster, vinculando los Grados con el ejercicio de la profesión de Ingeniero Técnico en Informática y el Máster con la profesión de Ingeniero en Informática.
En ambos proyectos de ley se considera que el ejercicio de la profesión de informática –entendida ésta como como el conjunto de conocimientos científicos y técnicos que hacen posible el tratamiento automático de la información por medio de ordenadores- “conlleva una deontología implícita que se presenta con mayor énfasis en aquellas actuaciones en las que puede invadir derechos de los ciudadanos que son protegibles”.
“Su ejercicio puede afectar de forma directa a la intimidad y a la libertad de las personas, además de resultar fundamental para la modernización de los servicios básicos para la ciudadanía y del sector industrial”, añade la exposición de motivos de ambos proyectos de ley.
En este marco se justifica la creación de los dos colegios, que responden al modelo de adscripción voluntaria y contribuirán a una mejor defensa de la observancia de las reglas y el código deontológico, y también redundarán en un mejor servicio a la ciudadanía en general y en un mayor nivel de exigencia de competencia y de calidad en el desempeño del trabajo por parte de los profesionales.