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Sábado, 23 de noviembre de 2024

Europa

El Gobierno de Aragón suscribe el documento “Una política regional fuerte y renovada para todas las regiones después de 2020”

El consejero de Presidencia, Vicente Guillén, ha remitido a Bruselas un texto que implica la posición común de las regiones europeas

«Los entes locales y regionales de Europa somos los responsables de diseñar y ejecutar estrategias de desarrollo, de prestar servicios a nuestros ciudadanos y de llevar a cabo las reformas necesarias para preparar a nuestros territorios para el futuro. Consideramos que, para alcanzar la cohesión económica, social y territorial en Europa, todavía nos queda un largo camino por recorrer, siempre sobre la base de los principios fundamentales de la política regional de la UE. Estos objetivos son ahora más pertinentes que nunca, dadas las crisis que amenazan el corazón mismo del Proyecto Europeo”, indica el documento al que se ha adherido el Gobierno de Aragón y que ha sido remitido a Bruselas por el consejero de Presidencia, Vicente Guillén.

El texto, indica que “somos y tenemos la firme voluntad de continuar siendo, socios claves de las instituciones europeas para colaborar estrechamente en la preparación de una política regional renovada que responda a los principales desafíos a los que se enfrenta Europa hoy en día y en el futuro. Nosotros, los entes locales y regionales europeos, nos comprometemos, por tanto, a contribuir a la remodelación de la Política Regional Europea después de 2020 aportando contribuciones concretas e innovadoras a los distintos elementos del debate, como son la simplificación, la flexibilidad, la orientación a resultados y la vinculación con el Semestre Europeo».

En otro párrafo del texto se afirma que “la legitimidad democrática de la Unión Europea (UE) se basa en los principios de subsidiariedad y proporcionalidad y, por tanto, las decisiones deben ser tomadas en el nivel más próximo posible a los ciudadanos. La Política de Cohesión es una de las políticas que mejor representa estos principios gracias a la gobernanza compartida y multinivel que en ella opera, y otros principios que se aplican como el de asociación, solidaridad, cooperación o la adopción de medidas basadas en datos empíricos y adaptadas al contexto local. Es una política centrada en las personas cuyos instrumentos se adaptan a las necesidades de regiones y ciudades de forma que estas puedan contribuir a los objetivos de la UE de acuerdo con su situación y necesidades específicas. Para que las políticas e iniciativas europeas tengan éxito y un mayor impacto, es necesario que los actores locales y regionales estén plenamente implicados en ellas. La Política de Cohesión es clave para fomentar una planificación y ejecución sostenible de inversiones a largo plazo que estén centradas en las prioridades estratégicas de la UE, tales como la investigación, la innovación, las energías renovables, las pymes, la competitividad, la creación de empleo, etc. Es, además, la política de la UE que mejor puede cuantificarse en cuanto a resultados”.

“La Política de Cohesión abarca a todas las regiones de Europa y, por lo tanto, ayuda a promover la convergencia y a reducir las disparidades dentro de las regiones y entre regiones, al mismo tiempo que les ayuda a conseguir los objetivos comunes europeos. Por consiguiente, la Política de Cohesión debe continuar cubriendo a todas y cada una de las regiones en el período posterior a 2020”, dice el documento.

“Una dotación presupuestaria suficiente es condición indispensable para una efectiva ejecución en toda la UE. Dados los diferentes tipos de desafíos socioeconómicos y medioambientales que persisten en el conjunto de la UE, las subvenciones deben mantenerse como principal instrumento de financiación en todas las regiones, pudiendo estas, adicionalmente, hacer uso de los instrumentos financieros cuando resulte adecuado”, es el párrafo que hace mención a la financiación de las regiones.

“El derecho de las regiones menos desarrolladas a recibir las mayores asignaciones financieras está fuera de toda duda pero, al mismo tiempo, es vital apoyar a las regiones en transición en sus esfuerzos por seguir creciendo, así como capacitar a las regiones más desarrolladas para que estabilicen y fortalezcan sus logros a través de una financiación suficiente. Es sabido que las regiones más desarrolladas facilitan y desencadenan procesos dinámicos entre todas las regiones”, afirma este documento comunitario.

“La cooperación transfronteriza, transnacional e interregional reúne a actores de diferentes Estados miembros y regiones, de modo que supone una contribución fundamental para Europa y sus ciudadanos, además de asegurar una mayor visibilidad del valor añadido europeo. Por lo tanto, esta política integral de cooperación territorial debería salir más reforzada y dotada con los suficientes recursos”, afirman las regiones firmantes en su posición común.

“Se debe garantizar un enfoque más flexible que contemple los diferentes tipos de medidas de financiación para alcanzar una mayor efectividad y eficiencia, y para responder de manera rápida a las necesidades y los desafíos. La simplificación es condición indispensable para una mejor ejecución. Hay que encontrar un equilibrio proporcionado entre la carga administrativa y el grado de apoyo de los fondos. La política regional requiere flexibilidad en la programación y puesta en marcha de proyectos para poder responder convenientemente a las distintas necesidades regionales. Se debe establecer un nuevo tipo de asociación basada en la confianza entre regiones, Estados miembros e instituciones de la UE para que la política pueda ser ejecutada de forma más eficaz”, termina diciendo el texto remitido a Bruselas.