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Viernes, 22 de noviembre de 2024

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El Presidente de Aragón visita la I Feria de la cereza y el ajo verde de Ricla y aplaude el empuje de los productores

Lambán defiende la reserva hídrica y la puesta en marcha de Mularroya para apoyar la economía local

El Presidente de Aragón ha visitado hoy la I Feria de la Cereza y el Ajo Verde celebrada en Ricla, dos de los productos con mayor arraigo y tradición de la localidad zaragozana, con el objetivo de potenciar y dar a conocer estos cultivos en la zona.

Lambán alaba el empuje de los productores de fruta de Ricla

Lambán defiende la aplicacón de innovación al sector de la agroalimentación

Lambán defiende Mularroya y la reserva hídrica para favorecer a los productores de fruta

En Ricla existen 4.500 hectáreas de regadío, donde se producen unos 100.000 kilos de ajo verde y de 8 a 10 millones de kilos de cereza en sus diferentes variedades. Las empresas de Ricla abastecen de esos productos a las principales cadenas de supermercados del país y comercializan en torno a 25 o 30 marcas de cereza y unas 6 o 7 de ajos.

Lambán, que además de visitar la feria también se ha desplazado hasta las instalaciones de una empresa frutícola de la zona, ha destacado el papel de los empresarios y agricultores de Ricla, "punteros y avanzados a nivel español y europeo", sobre todo en lo concierne a la exportación. Ambos productos cuentan con un importante mercado, tanto nacional como internacional, sobre todo el de la cereza, que se traslada hasta mercados de la Unión Europea y se está estudiando la penetración en el mercado de Asia y los Países Árabes.

En este sentido, el Presidente de Aragón ha recordado que el ejecutivo trabaja para vincular la logística en torno a Mercazaragoza y ser capaces de ampliar las exportaciones a través de la Terminal Marítima de Zaragoza, sobre todo de productos perecederos que el próximo año será ya una realidad tras la ampliación de apartaderos en el puerto de Barcelona –pasando de 35 a 45 contenedores más-, ya que además de permitir introducir más mercancías en vagones frigoríficos, abre más puertas a la agroindustria, permitiendo llegar a mercados más grandes como los del continente asiático.

Además, ha puesto en valor el esfuerzo realizado por los productores de la localidad hace años para elevar las aguas del subsuelo, lo que supone un alto coste para los riegos, dado los precios de la energía eléctrica. Por ello, Lambán ha defendido la importancia de que Aragón se muestre “intransigente” con la reserva hídrica que establece el Estatuto de Autonomía para hacer posible, por ejemplo, que Mularroya “sea una realidad cuanto antes”, porque estas obras ayudarían, a su juicio a sustentar la economía de Aragón.

Por otro lado, ha explicado que se trata de aprovechar la capacidad de investigación ya existente para vincularla con la producción, contando con el Instituto Agroalimentario de Aragón, una colaboración entre el Gobierno de Aragón y la Universidad, que da soporte a 30 grupos de investigación y acoge a 300 investigadores que trabajan en todas las fases de la cadena alimentaria.

“Estas líneas de investigación son el gran futuro de la agroindustria y suponen una combinación perfecta: la del sector primario y la innovación y tecnología, combinada con la logística”, ha señalado el presidente del Ejecutivo aragonés.

Javier Lambán se ha entrevistado precisamente esta misma semana con diferentes responsables de las comisiones de transportes, agricultura, desarrollo regional y otros campos, e incluso con el director del Banco Europeo de Inversiones, donde ha encontrado una alta receptividad a las propuestas de Aragón para que sean financiados proyectos tan vitales para el desarrollo de la Comunidad como es la salida a los puertos de Bilbao, Valencia y Barcelona.

La feria

En la jornada del sábado se han organizado tres ponencias en las que expertos de la zona tratarán asuntos como la historia de la cereza en la localidad y los nuevos retos, la innovación tecnológica en los cultivos y las opciones de comercialización en el territorio nacional y el extranjero.

En la jornada del sábado los agricultores y comerciantes de la zona situarán en la Plaza de España de la localidad puestos de cerezas y de ajos para la degustación de los productos y el conocimiento directo de su producción y comercialización.

La feria, que coincide con el final de la campaña del ajo y el comienzo de la de la cereza, ofrecerá también una mesa de cata de esta fruta, donde los asistentes podrán probarla y puntuarla, así como una "ajada popular" en el parque donde se podrán degustar los tradicionales ajos asados. El domingo se pondrá fin a la feria con una andada popular que llevará a los asistentes hasta las Cuevas de Ricla y durante el fin de semana algunos bares y restaurantes del pueblo ofrecerán menús temáticos basados en los ingredientes estrella: el ajo verde y la cereza.