El Hospital Clínico estrena su nueva lavandería y lencería, que podrá gestionar hasta tres millones de kilos de ropa al año
Se ha realizado a través de un proceso de Compra Pública de Innovación, que ha incluido la renovación de las instalaciones y de su equipamiento, con una inversión de casi 3 millones de euros
Se obtendrá una producción de lavado de 1.564.000 a 3.000.000 kilos al año, frente los 1.300.000 kilos anteriores y una dispensación automática de 292.000 prendas al año
El Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de Zaragoza ha estrenado ya su nueva lavandería y lencería, permitirá duplicar con creces la ropa procesada. Las empresas adjudicatarias han invertido casi tres millones de euros en la renovación de los espacios y del equipamiento, que conllevarán además una notable mejora de las condiciones de trabajo y una reducción de los consumos energéticos. La puesta en marcha de esta instalación ha sido posible gracias a un procedimiento de Compra Pública de Innovación (CPI) dividido en dos lotes, uno para el lavado de ropa y otro para su almacenamiento y distribución mediante sistemas automáticos de ropa de uniformidad, que fueron adjudicados en su momento a las compañías Girbau y La Fábrica del Software, respectivamente. Dicho contrato, con un importe de licitación de 6,1 millones de euros y una duración de 12 años, sin contar prórrogas, ha incluido la adecuación y reforma de los espacios, el suministro y montaje todas las instalaciones, equipos y sistemas necesarios para realizar el servicio de lavado, secado y planchado de la ropa, así como su almacenamiento y dispensación automática en el área de lencería general y áreas quirúrgicas. Inversiones
Para todo ello, las inversiones necesarias a cargo de los adjudicatarios previstas en la licitación han alcanzado casi los tres millones de euros (2.431.206 euros en la lavandería y 390.825 € para el almacenamiento y distribución de ropa), la mayor parte de las mismas destinadas a las necesidades de tecnología y equipamiento (2.201.848 euros) y el resto (620.183 euros) para las obras de acondicionamiento y adecuación de los espacios de trabajo. Adicionalmente, durante los 12 años de contrato, toda la instalación, reparaciones y consumibles (jabones, repuestos, productos químicos de tratamiento de agua, ceras, etc.), serán responsabilidad de las empresas adjudicatarias debiendo garantizar el mantenimiento y buen funcionamiento de las instalaciones.
Barrasa, sobre la inversión realizada en la nueva lavandería.
Ventura explica el proceso para la adecuación de la nueva lavandería en el Clínico.
Barrasa detalla el incremento de producción que se puede realizar con la nueva lavandería.
El inicio de las obras de reforma, adaptación e instalación de la maquinaria comenzó a finales de julio de este año y durante todo este tiempo la ropa del Hospital Clínico Universitario ha sido lavada en la lavandería del hospital Universitario Miguel Servet por personal del propio Hospital Clínico.
A partir de ahora, la lavandería del Clínico será capaz de obtener una producción de lavado de 1.564.000 y 3.000.000 kilos al año, en función de los turnos de trabajo que se programen (unos 6.300 kilos por turno de trabajo), frente los 1.300.000 kilos anteriores. Asimismo, permitirá una dispensación automática de 292.000 prendas al año, dando así servicio suficiente a los centros del sector Zaragoza III, en el que trabajan 5.200 personas y se ubican 980 camas de hospitalización, además de consultas, áreas de urgencias, hospital de día y tratamientos ambulantes, pudiendo, asimismo, absorber las necesidades de lavado de otros centros como el hospital de Calatayud, entre otros, y descargar así la presión de trabajo de la lavandería del Hospital Miguel Servet. En todo momento, el personal de lavandería y lencería que va a trabajar con este equipamiento será propio del Hospital Clínico, que también tendrá acceso y gestionará toda la información necesaria para el control de la ejecución del contrato. El único personal externo que trabajará en las instalaciones será el personal de mantenimiento del adjudicatario que sea necesario para garantizar el funcionamiento de las mismas. Además de la innovación tecnológica, de la mejora de las condiciones de trabajo, de la mayor ergonomía de los puestos de trabajo y, en consecuencia, de la reducción de riesgos laborales inherentes a esta actividad, las nuevas instalaciones van a tener también un impacto positivo en la huella ecológica del hospital, por la reducción de consumos energéticos de luz, gas y de agua y van a suponer una reducción de los costes totales del servicio, gracias a una mayor eficiencia, capacidad y automatización de una parte de las instalaciones. El servicio se retribuirá al adjudicatario por unidades de servicio (kilo de ropa lavada y prenda dispensada automáticamente), de modo que se pagará por los resultados obtenidos a lo largo del tiempo y está planteado para que se autofinancie con los ahorros esperados sobre los costes operativos anteriores, de modo que no precisará ninguna inversión directa en el ciclo completo del contrato. Reconocimientos El proceso de Compra Pública de Innovación que ha dado origen a esta nueva realidad denominado proyecto SIGLA (Sistema Inteligente de Gestión de Lavandería y Lencería), que se inició con una primera consulta preliminar al mercado en julio de 2017, supuso el reconocimiento a esta iniciativa del Clínico por la EAFIP (European Assistance for Innovation Procurement), organismo dependiente de la Comisión Europea, así como el galardón en la I edición del Premio Amparo Poch a la mejor compra pública de innovación 2019, compartido “ex aequo”, con el Servicio Gallego de Salud, otorgado por la Cátedra IACS en Compra Pública de Innovación. La compra por CPI es una apuesta para la mejora de los servicios públicos de la mano de las empresas, que son quienes conocen en profundidad los procesos y últimas tecnologías en la materia, de modo que se produce un incentivo mutuo en todo el desarrollo del contrato.