El Hospital Nuestra Señora de Gracia de Zaragoza pone en marcha una de las Unidades de Prevención Cardiovascular y Rehabilitación cardiaca más grandes de España.
Sanidad de Aragón
El Hospital concentrará la atención de pacientes con cardiopatías procedentes del Miguel Servet, el Clínico y el Royo Villanova
Más años de vida, vividos con mayor calidad y con menos riesgo de sufrir otro infarto cardiaco. Estos son algunos de los beneficios constatados científicamente que aportan los programas de prevención cardiovascular y rehabilitación cardiaca. El Hospital Nuestra Señora de Gracia de Zaragoza, popularmente conocido como el Hospital Provincial, inicia un ambicioso proyecto al poner en marcha una Unidad de Rehabilitación cardiaca que va a acoger a enfermos de los hospitales Clínico “Lozano Blesa”, “Miguel Servet” y “Royo Villanova”.
Oliván señala el impulso sanitario que se ha dado al Hospital Provincial
Oliván destaca la importancia de la nueva Unidad de Rehabilitación Cardiaca
La Unidad va a atender a cardiópatas dándoles la oportunidad de reincorporarse a sus puestos de trabajo de forma más precoz, o en el caso de estar jubilados, de retomar su actividad normal de una forma saludable. La actividad de la Unidad comienza en abril de forma gradual (con un grupo de diez enfermos) para poco a poco aumentar su capacidad hasta llegar, en un año, a entre 70 y 80 enfermos cada dos meses, que es lo estimado que durará el programa completo. Cuando la unidad esté a pleno rendimiento, será una de las más grandes de España.
El programa incluye charlas formativas, control de los factores de riesgo cardiovascular (colesterol, diabetes, tensión alta, obesidad, tabaquismo…), entrenamientos físicos supervisados, terapia de grupo y un largo etcétera que requiere inevitablemente de la implicación del enfermo para desterrar los hábitos de vida que le han conducido a su enfermedad cardiovascular. Según el consejero de Sanidad, Ricardo Oliván: "El SALUD pone a disposición del paciente un equipamiento de primer nivel valorado en más de 150.000 euros y un equipo profesional multidisciplinar que guía al enfermo en este programa bajo el convencimiento de que un paciente activo, responsable y comprometido en su tratamiento va a mejorar su calidad de vida y reducir el riesgo de repetir los episodios cardíacos".
En todo momento, el programa es personalizado, adaptado a las necesidades de cada paciente, a sus condiciones físicas e incluso a su disponibilidad. Habrá enfermos que requieran, por ejemplo, hacer un entrenamiento físico de forma presencial en la sala de Rehabilitación Cardiaca de forma ambulatoria, con monitorización electrocardiográfica inalámbrica constante, y otro grupo de pacientes podrá seguir el programa supervisado en su propio domicilio.
Los candidatos a estas terapias son, por un lado, los pacientes denominados isquémicos (con afectación en las arterias coronarias). Aquí se incluyen personas que han sufrido un infarto cardíaco/angina de pecho y han precisado de la implantación de uno o varios “stent”; que han sido sometidos a cirugía cardiaca o enfermos con insuficiencia cardiaca. En todos ellos, el programa debe iniciarse de forma precoz.
Es la primera vez que se pone en marcha un proyecto que afecta a los cuatro hospitales públicos de la ciudad de Zaragoza con la implicación de los correspondientes servicios de Cardiología y de Medicina Física y Rehabilitación. Para la puesta en marcha de la Unidad se contratarán ocho profesionales (tres cardiólogos, un rehabilitador, un fisioterapeuta y tres enfermeros). Según Oliván: "esto ya es un claro ejemplo de las ventajas de la implantación del Área Unica ya que evita solapamientos entre los centros además de que sirve para aprovechar los recursos disponibles. La creación de Áreas clínicas hace que se integre bajo un único responsable determinadas actividades asistenciales permitiendo así unificar determinados servicios clínicos actuales, evitando duplicidades, ineficiencias y deficiente gestión de recursos humanos. Pero sobre todo conseguimos nuestro objetivo final que no es mas que mejorar la eficiencia desde el punto de vista asistencial."
Otras unidades de rehabilitación cardiaca, como la del Servet, seguirán en marcha, ya que en ella se atiende a pacientes que han sido trasplantados de corazón o algunos que proceden de Cirugía Cardiaca.
Apuesta por el Hospital Provincial
Con la puesta en marcha de esta Unidad se continúa en la línea de potenciación de este céntrico Hospital zaragozano, que ha recibido una fuerte inversión económica en Radiodiagnóstico y un impulso en el servicio de Urgencias.
Respecto al área de Radiodiagnóstico, se ha hecho una inversión de más de 3,2 millones de euros en Radiología del Sector I para la adquisición de una resonancia magnética de última generación, que está instalada en el HNSG, y dos escáneres, uno en el Royo Villanova y otro en el Provincial, además de un mamógrafo digital, entre otros equipamientos.
El servicio de Urgencias se ha visto impulsado para evitar desplazamientos de la red primaria a otros hospitales a pacientes que requieran de pruebas de laboratorio o Radiología.
ÁREAS I, II Y III DE ZARAGOZA
La rehabilitación cardiaca consiste en una serie de actividades necesarias para asegurar a los cardiópatas unas condiciones físicas, mentales y sociales óptimas, que les permita ocupar, por sus propios medios, un lugar tan normal como les sea posible en la sociedad. La evidencia científica avala que estos proyectos llevados a cabo adecuadamente pueden reducir hasta en un 30% la mortalidad de los cardiópatas, bajan en un 43% la morbilidad (las complicaciones asociadas) y reduce los costes sanitarios (más de 5.000 euros anuales por paciente y año).
1- Fase I - Hospitalaria (entre tres y diez días). El paciente está en un proceso de enfermedad aguda. En esta fase se contacta con la unidad de rehabilitación cardiaca y se le da información sobre su enfermedad. Al alta hospitalaria se evalúa su situación, ya que cada per-sona tiene un riesgo diferente a padecer diferentes complicaciones tras la enfermedad. El riesgo puede ser ligero, moderado o severo y se valora según parámetros clínicos o determinadas pruebas (eco cardiografía, prueba de esfuerzo).
2- Fase II – Ambulatoria (Tras el alta hospitalaria). Es en este periodo en el que va a desarrollarse el Programa de Prevención Cardiovascular y Rehabilitación cardiaca, con el programa adecuado al nivel de riesgo estimado. Al final del programa, que tiene una duración media de ocho semanas, los pacientes pueden reincorporarse a una vida sociolaboral lo más normal posible, con nuevos hábitos de vida cardiosaludables.
3- Fase III - Mantenimiento. El enfermo ha terminado su proceso de rehabilitación cardiaca y recibe el alta si bien tiene que seguir los hábitos de vida cardiosaludables adecuados du-ante toda la vida.
En la Fase II se desarrolla el trabajo en la Unidad de Prevención Cardiovascular y Rehabilitación Cardiaca y comienza con unas sesiones formativas donde se instruye al enfermo para iniciar un proceso de control y cambios de hábitos de vida. Ello continúa con un seguimiento cardiológico enfocado a ese cambio de hábitos de vida, con controles de todos sus factores de riesgo cardiovascular (colesterol, glucemia o tensión arterial, entre otros parámetros). El Programa dispone de un área de consejo dietético, con control de sobrepeso, pues la obesidad es otro de los principales factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares. La Unidad también cuenta con la participación de un psicólogo para tratar la ansiedad, aprender a controlar el estrés y asumir una actitud responsable ante la enfermedad. También se enseñan técnicas de relajación.
El entrenamiento físico es uno de los pilares fundamentales de ese programa, la mayoría de los pacientes realizan los ejercicios en el área de fisioterapia del Hospital de forma supervisada por los médicos de la unidad de forma presencial, con monitorización electrocardiográfica; otro grupo con muy bajo riesgo lo puede hacer desde su domicilio de una manera supervisada por facultativos.
El programa se acompaña de una consulta de deshabituación tabáquica y otra de disfunción sexual para las personas que lo necesiten, así como de un área de Trabajo Social para consejo laboral o adaptación al puesto de trabajo en el caso que se requiera.
La Unidad de Prevención Cardiovascular y Rehabilitación cardiaca de Zaragoza está integrada por los Servicios de Cardiología de H. Miguel Servet, H. Lozano Blesa y H. Royo Villanova, tiene su sede en el Hospital Ntra. Sra. de Gracia y está dotada de:
– Gimnasio con 6 cicloergómetros y 4 tapices rodantes con monitorización telemática (ECG, TA y StO2).
– Pruebas funcionales: Ergometria y Ergoespirometría, Ecocardiógrafo, Holter arritmias y de tensión arterial..
– Aula: para charlas educativas y sesiones de Psicoterapia
– Diferentes consultas: Cardiología, Rehabilitación Médica, Psicología, Dietética, deshabituación tabáquica, etc.
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Los profesionales directamente implicados corresponden a:
• Servicio Cardiología: Cardiólogos (uno por cada Hospital implicado) y Enfermeras
• Servicio de Medicina Física y Rehabilitación: Médico rehabilitador, Fisioterapeuta y Terapeutas ocupacionales.
• Servicio Psiquiatría: Psicólogo.
• Trabajador Social
• Colaboración de otros servicios, como Urología, Endocrinología...