El Gobierno de Aragón ha invertido 12 millones de euros en 2018 para la conservación de los espacios de la Red Natural de Aragón, un importante motor de desarrollo económico

El consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno de Aragón, Joaquín Olona, ha visitado este miércoles la Sierra de Santo Domingo, en Luesia. El paraje, localizado en las Cinco Villas, es uno de los paisajes protegidos dentro de la Red Natural de Aragón y se le atribuye un gran valor ecológico y geológico. Durante la visita ha estado acompañado por la directora general de Sostenibilidad, Pilar Gómez; el delegado regional de Red Eléctrica de España, José Ignacio Lallana y el alclade de Luesia, Jaime Lacosta.

La protección de los Parques Nacionales y Naturales, Reservas, Monumentos Naturales y Paisajes Protegidos, declarados para la mejor conservación de los recursos naturales, el paisaje, la fauna y flora silvestres, se están consolidando como un auténtico motor de desarrollo socioeconómico para todos aquellos municipios que integran los espacios naturales protegidos y sus áreas de influencia. A ello ha contribuido el Ejecutivo aragonés, en 2018, con 12 millones de euros.

En Aragón hay 18 espacios naturales protegidos, con más de 168.000 hectáreas protegidas y 78.000 ha de zona periférica, al que aportan territorio 77 municipios de la Comunidad Autónoma de Aragón. Además, durante la visita, el consejero ha recordado que el Ejecutivo aragonés ha satisfecho una vieja reivindicación de los municipios incluidos en las áreas de influencia de los espacios naturales protegidos, relativa a la aplicación de compensación económica por superficie. De esta forma, se destinan 2 millones de euros de inversión extraordinaria.

La colaboración entre Red Eléctrica de España y el Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno de Aragón ha permitido elaborar diverso material divulgativo sobre el Paisaje Protegido de la Sierra de Santo Domingo, con especial atención a sus lugares de interés natural y geológico, modos de vida tradicionales, fauna y especies vegetales. Así, tanto en los folletos editados como en las señales que se han colocado en los principales caminos y espacios visitables de la sierra, es posible conocer más de 40 aves que habitan en estos parajes y saber en qué épocas del año y dónde es más fácil contemplarlas. También ofrecen información sobre la abundante riqueza micológica de Santo Domingo, donde hay más de 450 especies de setas clasificadas, o acerca de las mariposas, de las que se han catalogado 700 solo en este paisaje protegido, que comprende 13.772 hectáreas en los municipios de Biel, Luesia y Longás, en la comarca de las Cinco Villas. Los oficios tradicionales encuentran también expresión en algunos de los indicadores que relatan por ejemplo el uso de las almadías que se utilizaban para transportar la madera desde los bosques del entorno hasta Sangüesa, en Navarra.

Esta actuación se enmarca en los convenios en materia de protección de la avifauna que mantienen Red Eléctrica de España y el Gobierno de Aragón desde hace casi 15 años, con una aportación económica por parte de la compañía de 20.000 euros anuales. Estos acuerdos han permitido poner en marcha iniciativas de gran interés para las aves en la comunidad autónoma, entre las que destacan programas de señalización con salvapájaros de líneas eléctricas y estudio de corredores de vuelo, el apoyo al plan de recuperación del águila azor-perdicera en Aragón, que incluía el marcaje y seguimiento de ejemplares con emisores satélite GPS y, más recientemente, la adecuación y mejora del centro de cría que la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos tiene en las proximidades de la Reserva Natural de los Galachos de La Alfranca de Pastriz, La Cartuja y El Burgo de Ebro, en Zaragoza.

Una sierra con un gran valor ecológico y geológico

Geológicamente, la Sierra constituye un anticlinal cabalgante de materiales calizos y margosos, dando lugar a relieves de paredes verticales de roca caliza cuyas cimas no superan los 1200 metros de altitud. Esta combinación de materiales dota el paisaje de una gran importancia resaltando Keuper, la Fuente del Yeso, la Cueva de Cristal (Longás), conglomerados de Malpaso y barranco de Siaskas en Luesia.

El río Arba de Luesia ha ido excavando los materiales más blandos (margas y arcillas) dejando al descubierto los estratos más duros de rocas areniscas, formando pozas de gran belleza, caso del Pozo de Pigalo y Pozo de María en Luesia. A su paso por Biel, el Arba, en su curso alto ha dejado al descubierto las areniscas duras combinadas con mineral de cobre en la zona conocida como La Mina. Más abajo de Biel, el río ha horadado el conglomerado formando estrechos, como el conocido Pozo de Tronco.

La singular orografía de la sierra de Santo Domingo genera la existencia de una gran riqueza de formaciones vegetales, que cubren sus laderas y se estructuran según los requerimientos de temperatura y humedad, con algunas peculiaridades fruto de las inversiones térmicas existentes en barrancos. El paisaje de la sierra Santo Domingo se configura como un mosaico de formaciones boscosas naturales, pinares de repoblación, matorrales de transición, pastizales de gran valor ecológico y formaciones rocosas con vegetación incipiente. Todas estas formaciones albergan una gran riqueza faunística, ya que esta Sierra favorece una cohesión ecológica entre el valle del Ebro y Pre y Pirineo.