Pilar Alegría destaca el trabajo del Gobierno de Aragón por una Universidad pública de excelencia, suficientemente financiada y con buenas infraestructuras

La consejera de Innovación, Investigación y Universidad, Pilar Alegría, ha participado en la celebración de San Braulio, patrón de la Universidad de Zaragoza, donde ha reivindicado el trabajo de estos tres años para hacer más accesible la Universidad pública. Un trabajo en una doble dirección “incrementar significativamente el número y cuantía de becas y ayudas, y la reducción de precios de matrícula en grados y másteres”. De este modo, entre 2015 y 2018 el presupuesto destinando a becas se ha multiplicado por 12, y el número de estudiantes que han recibido una ayuda se ha multiplicado por 8, pasando de 223 a 1851. En 2018, “contamos con superar los dos mil beneficiarios directos”. También se ha trabajado en una rebaja de un 7% en conjunto del precio público de los grados y en los másteres no habilitantes de hasta un 20%. Pilar Alegría ha defendido que “el acceso a una educación superior de calidad es más necesario que nunca y una exigencia política y moral de las democracias modernas”.

La consejera ha señalado el inicio del camino para lograr una “universidad pública de excelencia, suficientemente financiada, con buenas infraestructuras y una plantilla adecuada a la complejidad de los retos científicos y sociales que debe atender”. Se trata de un objetivo compartido por el Gobierno de Aragón y el actual equipo rectoral y en el que ya se están dando pasos, la consejera ha recordado que la transferencia básica del ejecutivo a la universidad ha crecido un 10% entre 2015 y 2018, superando ya los 158 millones de euros este ejercicio. Pilar Alegría, también en declaraciones a los medios, ha pedido al Estado que mejore la financiación de las comunidades que son las que hacen frente al pago del aumento salarial y reclama una reforma de la Ley de Universidades que ayude a mejorar la estabilidad de la plantilla de las universidades públicas.

Así mismo, Pilar Alegría se ha referido a la reforma de la Facultad de Filosofía y Letras cuyas obras comenzarán este año y financia el ejecutivo. Con la obra “se cancela una deuda que venía arrastrando la sociedad aragonesa con los alumnos y profesores de la facultad” pero también supone “una reivindicación de las ciencias humanas y sociales” símbolo del esplendor e historia de la Universidad. Y ha destacado el apoyo también a la actividad investigadora. En la Universidad de Zaragoza se genera el 70% de la producción científica de Aragón, “cuando incrementamos la financiación básica, estamos contribuyendo a que mejore la salud y la actividad de nuestro sistema de ciencia y tecnología”. Además, la consejera ha señalado el Pacto por la Ciencia o la Ley de Investigación e Innovación de Aragón como herramientas para dar estabilidad, continuidad y consenso social a la actividad investigadora en nuestra comunidad.

Un acto, presidido por el rector José Antonio Mayoral, en el que se ha recordado la figura de Manuel López, como un “defensor incansable” de la universidad pública. Pilar Alegría ha señalado su faceta humana y académica, pero sobre todo su manera de afrontar las dificultades y su idea de que “nuestra sociedad no tiene futuro si no cuida su universidad”. La consejera pide que el legado de López “sea un faro para conseguir una sociedad más justa y más culta”.