Los centros de día y ocupacionales de Aragón abren sus puertas a partir del lunes

Los centros de día y ocupacionales de Aragón podrán abrir sus puertas a partir del próximo lunes bajo estrictas medidas de seguridad y organización para proteger a sus usuarios y al personal. En la Comunidad Autónoma, en el marco de atención a las personas en situación de dependencia hay 1.605 personas que reciben esta prestación pública, a la que hay que sumar 778 personas que se benefician de la prestación vinculada al servicio. A estos hay que añadir otros 500 que reciben la prestación pública concertada en el marco de atención a las personas con discapacidad. En estos dispositivos, se ofrecen reciben terapias y actividades en grupo destinadas a mejorar las capacidades motoras y cognitivas con el objetivo de prolongar su autonomía el máximo tiempo posible. En Aragón hay 51 centros de día para personas dependientes, 49 para personas con discapacidad y 49 centros ocupacionales.

Su apertura –ha explicado Joaquín Santos, director gerente del IASS- supone “un paso hacia la entrada a la nueva normalidad. Cientos de personas y sus familias van a poder recuperar sus ritmos habituales de vida y muchas personas se van a ver beneficiadas por la enorme capacidad de conciliación de la vida laboral y familiar que suponen este tipo de centros”. Además, esta atención es muy importante para ralentizar el avance de patologías degenerativas y supone, asimismo, un apoyo fundamental para las familias.

Entre las medidas que se detallan para que estas instalaciones puedan abrir sus puertas desde el lunes, coincidiendo con la “nueva normalidad” figuran:

Además de las normas e indicaciones comunes a todos los centros de día, la orden del Departamento de Ciudadanía y Derechos Sociales detalla medidas adicionales para aquellas instalaciones que, además de las actividades propias de estos recursos, prestan también servicios esenciales (podología, rehabilitación, fisioterapia o terapia ocupacional, entre otros), así como a aquellos que ofrecen comedor.

Sobre los primeros, se estipula cómo debe organizarse la atención, priorizando a los receptores en función de su estado de salud y estableciendo el sistema de citas previas. Respecto al uso del comedor, se detallan medidas como el establecimiento de turno y la clara delimitación de las distancias de seguridad o el uso de mantelerías y productos de autoservicio de un solo uso. En el caso de que la comida se prepare para llevar, se priorizará su entrega en el exterior y respetando las mismas medidas ya detalladas.

Con esta medida, el conjunto de las prestaciones que ofrece el Sistema Público de Servicios Sociales entra en la nueva normalidad en un proceso de continua adaptación a las circunstancias que marca la pandemia. A partir de ahora –ha recordado Santos- “habrá que extremar las actitudes de responsabilidad individual para enfrentarnos al covid19 con la misma eficacia que lo hemos hecho hasta ahora”.