Javier Lambán defiende la fiscalidad aragonesa, necesaria para financiar servicios públicos e inversión en investigación

El Presidente de Aragón, Javier Lambán, ha sido invitado por el Foro APD y Deloitte para hablar de la economía de la Comunidad y durante su intervención ha defendido la política fiscal de su gobierno, por ser progresiva y justa para financiar los servicios públicos de calidad, máxime cuando existe una infrafinanciación por parte del Estado, una cuestión pendiente.

Lambán ha negado la mayor: que las empresas no se instalen en Aragón por la carga fiscal. Asegura que ninguna empresa que consulta lo hace sobre estas cuestiones, por lo que ha afirmado que, contra las críticas vertidas por el número de empresas catalanas que han modificado su sede y se han decantado por otros destinos, “lo único que me preocupa es que las empresas que vengan inviertan y creen empleo. No me quita el sueño no ser campeones en domicilios sociales”, lo que considera una realidad virtual, al tiempo que ha recordado que en los últimos dos años y medio ninguna comunidad ha tenido más inversiones reales de empresas de Cataluña que Aragón.

Además, Lambán ha renunciado a adoptar una actitud “carroñera” en la situación actual de fuga de empresas, “entre otras cosas porque si a Cataluña le va mal, a Aragón irá peor”, dada la fuerte vinculación entre las economías de ambas comunidades vecinas. No obstante, ha recordado que las deslocalizaciones se han producido “en tropel” desde que Artur Mas llegara al poder en 2012, muchas de ellas a Aragón, pero hasta ahora no se había puesto el grito en el cielo y eso no se ha percibido en la economía real “porque es una cuestión puramente virtual sin incidencia en la economía real”.

Lambán ha cargado contra la deriva de un “debate cínico” y ha asegurado que él trata de ser “corresponsable fiscalmente con el Ministerio de Hacienda”, argumentando que no le puede exigir a este mayor financiación y al mismo tiempo renunciar a los instrumentos propios de financiación, esto es, los impuestos, tal como han hecho otras comunidades por presiones de sus socios de gobierno.

“No entiendo que se nos exija pagar más pronto a los proveedores –que lo hemos hecho-, reducir el déficit –que lo hemos hecho-, financiar servicios públicos como lo hacemos y además se me reproche que no haga carreteras y al mismo tiempo baje los impuestos”, ha explicado y ha añadido que este año Aragón liquidará con déficit pese a la recaudación por impuestos porque es claramente insuficiente. El Presidente de Aragón ha emplazado a todas las comunidades y al Estado a buscar un equilibrio fiscal y ha criticado el “premio recibido” por el País Vasco en forma de cupo, precisamente cuando fue una de las dos comunidades, junto con Cataluña, no participó en la conferencia de presidentes y a la que más se ha favorecido después.

La falta de una financiación adecuada es, a juicio de Lambán, lo que hace que una Comunidad con un territorio como el de Aragón sea "inviable" porque si no se aseguran oportunidades de empleo, de salud o de educación está "abocado al fracaso" y pone como ejemplo que el gasto por alumno en un centro rural triplica al de uno de la capital aragonesa.

Prestar servicios es "carísimo, inabordable", un 14 % por ciento superior a la media española, por lo que considera que una cuestión como la despoblación exige una solución "de Estado, de índole estratégica".

Un modelo socialdemócrata

En su conferencia, el Presidente de Aragón ha relatado como su gobierno, claramente socialdemócrata, adoptó la decisión de afrontar la salida de la crisis con todos, no dejando a nadie atrás, por lo que sus prioridades durante la primera parte de la legislatura ha sido el aumento presupuestario en las áreas más saqueadas, como la educación, la sanidad y las políticas sociales. No obstante, ha puesto en valor el papel de la empresa privada en una economía de mercado “que no puede ser una institución desregularizada” pero que es uno de los principales motores de progreso de la comunidad y con la que ha defendido una convivencia y una interactuación permanente, de colaboración mutua.

Con unas competencias y unos recursos limitados, Lambán asegura que su gobierno solo se puede permitir intervenir en la economía a través de la oferta, lo que ha hecho con diálogo social, formación e innovación e investigación, asegurando que para una tierra como Aragón, el conocimiento debe ser una de sus principales herramientas de futuro. En este sentido, ha explicado que se ha dado prioridad a las inversiones en educación con especial incidencia en la FP general y dual, así como a la recuperación de niveles en materia de investigación e innovación, tratando de superar los alcanzados antes de la crisis económica, razón por la cual se ha incrementado el presupuesto de la Dirección General de Investigación e Innovación en un 65,53 % este año.

También ha presumido de ser la única comunidad que ha firmado un Pacto por la Ciencia para blindar la financiación pública en I+D+i y generar una senda de crecimiento que nos lleve a alcanzar la media española y europea en inversión en la materia.

Pero ha aconsejado que también lo haga el sector privado, creyendo en las oportunidades que el sistema de innovación e investigación les ofrece. De hecho, las pymes aragonesas invierten en I+D+i unos cuatro puntos por encima de la media nacional y ha anunciado una línea de ayudas para empresas y grupos de investigación.

Gobierno emprendedor

Lambán ha calificado a su ejecutivo de “emprendedor” y ha relatado que su objetivo ha sido reactivar sectores que estaban adormecidos como la logística, la agroalimentación, las renovables y la cultura, esta última, como industria y como imagen exterior de las capacidades de la Comunidad autónoma.

El Presidente de Aragón ha vuelto a incidir en la oportunidad que debe aprovechar Aragón en las partidas decisivas que se están jugando en el tablero nacional “porque si no jugamos bien perderemos el carro del futuro”. En este sentido, ha abogado por defender la política hidráulica por ser el agua un elemento básico para la economía regional, así como un sistema de financiación autonómica justa y por último, dando una salida a al problema de Cataluña y su reacomodo en la Constitución española. Igualmente, ha emplazado a crear una imagen de España grande en el imaginario colectivo y creer en ella porque a su juicio este es el país más descentralizado y más rico en historia, lengua y cultura, que no debe verse enturbiado.