Cultura
El Gobierno de Aragón cree que la petición del MNAC de que el IPCE realice un informe pericial es “absolutamente extemporánea” y pide a la juez que la rechace
El director general de Cultura recuerda que no sería una pericial independiente dado que el IPCE depende del Ministerio de Cultura, que es patrono del MNAC
El Ejecutivo autonómico solicita también que no se admita la petición de la Generalitat de sumarse al proceso como “ejecutado adhesivo”
El Gobierno de Aragón ha registrado dos escritos ante el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Huesca por los que presenta alegaciones al cronograma planteado por la Generalitat; pide a la juez que rechace la petición del MNAC de que el Instituto de Patrimonio Cultural de España (IPCE) realice un informe pericial sobre las pinturas murales del Monasterio de Sijena, al considerar la solicitud “absolutamente extermporánea”; así como se reclama también a la magistrada que rechace la petición de la Generalitat de sumarse al proceso como “ejecutado adhesivo”.
En rueda de prensa, el director general de Cultura del Gobierno de Aragón, Pedro Olloqui, ha lamentado los intentos de las instituciones catalanas de generar “confusión” sobre la posibilidad de que las pinturas murales y profanas del Monasterio de Sijena regresen a su lugar de origen, “una estrategia premeditada” ante la que hay que advertir, de nuevo, que la ejecución de la sentencia que decretó su regreso “debe ser cumplida sin dudar, estamos en una fase irreversible de su cumplimiento”, ha dicho tajante el director general.
“Técnicamente es totalmente posible el traslado, las pinturas son perfectamente capaces, con las debidas protecciones y medidas de seguridad, de soportar un traslado como el previsto”, ha recalcado, para valorar que las instituciones catalanas solo están “tratando de dilatar indebidamente el proceso” y cuentan para ello con la “connivencia” del Ministerio de Cultura y del Gobierno de España.
De este modo, el Ejecutivo autonómico ha presentado un primer escrito en el juzgado con sus alegaciones al cronograma propuesto por el MNAC y para rechazar la petición del museo para que el IPCE elabore un informe pericial sobre las pinturas murales.
En este escrito, se recuerda que Aragón goza de legitimación activa en el procedimiento en aras a la recuperación, conservación y difusión del patrimonio cultural aragonés, tal y como recoge el propio Estatuto de Autonomía y la Ley de Patrimonio Cultural de Aragón y se indica también que, según esta última norma, es la Comisión Provincial de Patrimonio Cultural de Huesca el órgano competente para autorizar cualquier intervención sobre las pinturas murales de Sijena, “no ningún órgano administrativo de la Generalitat de Cataluña, ni del Estado; es una competencia exclusiva de la Comunidad Autónoma de Aragón”.
El escrito apunta que la consideración en el tratamiento de las pinturas profanas “debe ser igual a todos los efectos que la de las pinturas de la Sala Capitular, dado que ambos conjuntos murales están declarados BIC, tienen la misma protección legal, ambos son conjuntos murales con una técnica de ejecución original comparable y de la misma época, “han sido objeto de tratamientos igualmente agresivos y tienen una historia material equiparable”.
Alegaciones al cronograma del MNAC
En relación al cronograma alternativo presentado por el MNAC, el Ejecutivo aragonés considera que los plazos previstos “son excesivamente amplios y carecen de justificación técnica”, llegando a considerarse en algunos casos incluso “innecesarios”. Además, “en ningún momento se plantea el solapamiento de procesos y/o fases que se podrían gestionar de forma paralela, acortando enormemente el plazo global propuesto”, para acercarse a los siete meses planteados por Aragón.
“Presentan un cronograma meramente lineal con la evidente voluntad de alargar innecesariamente los plazos, incumpliendo cualquier principio de eficiencia técnica, administrativa y profesional”, ha advertido Pedro Olloqui. Así, se plantea la reducción del plazo en distintas fases del cronograma alternativo del MNAC, como la fase 1 de estudios previos y diagnósticos del bien cultural y su entorno, un análisis que compete a Aragón, por lo que las tres semanas previstas por el MNAC se pueden suprimir del cronograma. “Como prueba de colaboración, el Gobierno de Aragón ha facilitado un certificado en el que se acredita la estabilidad tanto estructural como de condiciones medioambientales de las salas que albergarán ambos conjuntos murales”, ha mencionado el director general.
Otras fases en las que se pueden acortar plazos es en la fase 2, de evaluación de riesgos, dado que la evaluación de riesgos en el nuevo emplazamiento no es competencia ni del MNAC ni de la Generalitat y el plazo de 6 semanas propuesto es “totalmente excesivo”; sobre la fase 3, de evaluación metodológica, se reitera la necesidad de suprimir esta evaluación en cuanto a la instalación en el nuevo emplazamiento, que es responsabilidad de Aragón, y el plazo de seis semanas es de nuevo excesivo y podría reducirse a la mitad.
Se recuerda también que, en cuanto a la recomendación de realizar simulaciones con réplicas a escala real, la Escuela de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Aragón ya realizó una réplica a escala 1:1 de una albanega completa con este fin en 2023, que se ha ofrecido reiteradamente para el estudio de los procesos que requieran manipulación o desplazamiento de los fragmentos. En la fase 4, de redacción del proyecto técnico, no se propone reducir plazos; pero en la fase 5, de aprobaciones administrativas se reitera que algunos puntos corresponden exclusivamente a la Comisión Provincial de Patrimonio Cultural de Huesca.
La fase 6, de licitación, también podría acortarse siguiendo el cronograma propuesto por el Gobierno de Aragón; y en la fase 7, de ejecución del proyecto, el MNAC establece un plazo de 16 semanas para la consolidación de las obras que “es totalmente excesivo” y que puede reducirse aumentando el número de conservadores-restauradores que ejecuten estos tratamientos de consolidación. Como dato orientativo se recuerda que para completar el montaje expositivo de 1995 en el MNAC se emplearon menos de 4 semanas que incluían todo el conjunto de las tareas.
“Totalmente arbitrario”
En relación con estos tratamientos, los resultados de los análisis obtenidos por el Gobierno de Aragón a partir de las muestras tomadas en el propio MNAC el pasado 30 de julio, constatan que las dos muestras extraídas de las pinturas profanas y de la Sala Capitular, a pesar de los años que median entre sus arranques y trasposiciones, presentan los mismos productos (hidróxidos de magnesio, calcio, caseína, componentes minoritarios de carboxilatos, ácido oxálico y láctico).
Ambas muestras presentan una microporosidad que se encuentra parcialmente saturada por el caseinato empleado en su trasposición al nuevo soporte. En consecuencia, “su composición es muy similar y su reactividad química no es preocupante en ninguno de los dos casos, manteniendo unas condiciones medioambientales estables que quedan garantizadas en el Monasterio de Sijena”, ha subrayado Olloqui.
Por último, la ampliación de la totalidad del plazo previsto en el cronograma alternativo presentado por el MNAC en un 15% para hacer frente a la complejidad de la operación se considera “totalmente arbitraria” y carente de fundamento en datos concretos que la avalen.
Informe del IPCE
Respecto a la petición del MNAC de que el IPCE elabore un informe pericial consistente en un proyecto de conservación referido al cambio de ubicación del conjunto pictórico expuesto en la sala 16 del MNAC (pinturas murales), el Gobierno aragonés ha considerado que esta petición es “absolutamente extemporánea”.
Ha solicitado que se rechace “de plano, sin más trámite”, al argumentar que ese dictamen pericial “independiente” debería haberlo solicitado el MNAC en el trámite de contestación a la demanda, y haberse practicado en prueba en el previo proceso declarativo en el juicio en 2015, no ahora cuando se está en fase de ejecución de la sentencia.
Además, no es una pericial independiente, dado que aunque el IPCE es una institución pública dedicada a la conservación y restauración de los bienes culturales que conforman el patrimonio histórico español, tiene la categoría de Subdirección General que depende directamente de la Dirección General de Bellas Artes del Ministerio de Cultura que es miembro del patronato --el órgano de gobierno-- del MNAC, demandado obligado a la devolución de las pinturas murales.
Segundo escrito
En el segundo escrito presentado se pide la desestimación de la intervención voluntaria de la Generalitat en el proceso, al valorar que “no tiene base jurídica y solo es un intento de fraude procesal en su estrategia dilatoria para no ejecutar la sentencia”.
La demanda del Gobierno de Aragón se dirige únicamente contra el MNAC, poseedor de las pinturas murales, no se dirigen acciones contra la Generalitat, dado que “nunca ha detentado la posesión material de los bienes objeto de la reivindicación” y, por este motivo, se considera que no debe admitirse su solicitud de intervenir porque no ha acreditado un “interés directo” en el procedimiento de ejecución.
“Vemos como el MNAC y la Generalitat insisten en sus maniobras dilatorias y llegan incluso a invadir competencias estatutarias del Gobierno de Aragón, que quieren ser ejercidas por el museo en este proceso”, ha aseverado el director general. Ha concluido exigiendo al Gobierno de España que “cese ya la connivencia con el MNAC, con quien están estableciendo una relación bilateral, dejando al margen a los aragoneses en un intento clarísimo de dilatar y dificultar el regreso de las pinturas murales de Sijena”, cuando el objetivo prioritario del ministerio debería ser el cumplimiento de las sentencias y la devolución de las obras, ha sentenciado.