Patrimonio Cultural
Aragón aprueba el convenio de colaboración con el Gobierno de Navarra para la reordenación de materiales arqueológicos procedentes de ambas comunidades
El acuerdo favorece el intercambio de bienes de cada una de las comunidades que, en la actualidad, permanecen en depósito fuera de su emplazamiento original
El Gobierno de Aragón y el Gobierno de Navarra suscribirán próximamente el convenio de colaboración merced al cual ambos ejecutivos se comprometen a intercambiar una serie de materiales arqueológicos que cada una de las administraciones custodia en su territorio y que, sin embargo, pertenecen a yacimientos arqueológicos ubicados en la comunidad vecina. El acuerdo cuenta ya con el visto bueno del Ejecutivo autonómico y hoy ha sido aprobado también por el órgano correspondiente de la Comunidad Foral. La especial relación que existe entre Aragón y la Comunidad Foral de Navarra propició la firma, el pasado 1 de octubre, de un Protocolo General de Colaboración en el que, entre otros puntos, se establece el compromiso de ambos Ejecutivos de impulsar líneas de actuación destinadas a la reordenación de los materiales arqueológicos procedentes de ambas comunidades autónomas. Este acuerdo favorecerá el traslado y depósito definitivo de los materiales arqueológicos de procedencia aragonesa o navarra, depositados en dependencias museísticas o almacenes del Gobierno de Navarra y de Aragón. Se incluyen elementos del proceso de romanización y evolución de las tierras de las Cinco Villas durante la etapa romana de la implantación una red viaria que uniría Cesaraugusta con Pompaelo; así como materiales cerámicas, líticas o metálicas, procedentes de más de una treintena de yacimientos arqueológicos de la cuenca del río Onsella, y del valle medio del Ebro. Además, al margen de la mesa técnica que estudiará la situación, el convenio contempla la entrega de los materiales aragoneses de la Colección Zuazúa Wegener al Gobierno de Aragón, que está depositada en el almacén de Arqueología del Gobierno de Navarra entre 2017 y 2018 y consta de varios miles de piezas líticas (sílex y hachas pulimentadas), metálicas y cerámicas de cronología prehistórica y romana, procedentes de varias decenas de yacimientos de localidades de las Cinco Villas zaragozanas.