El Museo de Zaragoza presenta la “Venus de Babiera”

La “Venus de Baviera” que el artista Honorio García Condoy (Zaragoza 1900- Madrid 1953) realizó para la cervecería Baviera, de Zaragoza, forma parte desde ahora de la colección permanente del Museo de Zaragoza. Se trata de una escayola pintada imitando a bronce de 1931-1932 que se ha integrado en las secciones de reconocidos artistas aragoneses del siglo XIX y XX y que hoy han presentado el director general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón, Javier Callizo y el director del Museo, Miguel Beltrán. La singularidad de la estatua, de 188x44x39 cm, radica en ser una producción que pertenece a la etapa de Condoy en la que experimenta una renovación formal, rompiendo con los modelos clásicos y adelantando formas cubistas y Art Déco. Con ello pasa a formar parte de un significativo conjunto de piezas de este artista que el museo conserva, ocho esculturas y otros tantos dibujos. Esta “Venus de Baviera” es la de mayor tamaño de la serie de desnudos femeninos en pie que Condoy modeló durante los primeros años de la década de 1930. Mantiene además evidentes puntos de contacto con otra gran realización, la denominada “Venus del Ebro” (1927), de la que toma la misma pierna adelantada que obliga a sobresalir a la cadera contraria; al igual que el giro de la cabeza y el aspecto del ropaje, pero incorporando ahora un nuevo lenguaje gestual. Otra de las circunstancias que hacen especial esta pieza es su propia historia, ya que fue realizada para la cervecería Baviera, abierta en 1932 en el paseo de la Independencia (entre los actuales números 23 y 25), al lado del reformado teatro Parisiana, al que sucederá el Argensola. Debió de colocarse en un rincón a la entrada del local y allí permaneció durante unos treinta años hasta su traspaso a la familia Maza, que colocó la estatua en alto, en un extremo de la barra, donde estuvo hasta el cierre del local. La escultura ha sido adquirida a través de un legado testamentario de su último propietario, don Joaquín Maza Ruba, que dejó testado que tras su fallecimiento la obra citada pasase a formar parte de la colección del Museo de Zaragoza. El tiempo y la actuación de María Soledad Polo Sicilia, usufructuaria de la escultura que hoy ha acudido a la presentación, hicieron posible que se ejecutara este legado testamentario y que la pieza pueda verse finalmente en el museo. La “Venus de Babiera” sólo pudo ser admirada en el propio Café Baviera hasta la década de los sesenta. Después se ha incorporado a las exposiciones zaragozanas en torno a Condoy en los años 1975, en el año 1995 a la muestra “Luces de la ciudad. Arte y cultura en Zaragoza 1914-1936” y finalmente al homenaje que se brindó al artista en el año 2000 en el Palacio de Sástago con motivo del centenario de su nacimiento. A partir de ahora esta Venus podrá verse en el Museo de Zaragoza como cierre a sus colecciones.