Cultura
Los visitantes de Dinopolis ya pueden conocer al nuevo dinosaurio de Ariño
Dinopolis expone ya el cráneo del nuevo dinosaurio ornitópodo identificado por la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel. Se trata de un inusual iguanodóntido basal, cuyo rasgo más singular es su exclusivo predentario (“pico”). El descubrimiento de este dinosaurio ha sido posible gracias a la localización de un extraordinario yacimiento del Cretácico en la localidad de Ariño, concretamente en una mina de lognito a cielo abierto. En él se han recuperado 348 huesos correspondientes al menos a 6 individuos diferentes, con variaciones en tamaño y, tal vez, en sexo. Entre el material recuperado destacan 3 cráneos (2 de ellos bastante completos), dientes aislados, huesos de la cintura escapular y pélvica, huesos de las extremidades (principalmente de las patas traseras), vértebras, chevrones y costillas. El nuevo dinosaurio fue comedor de plantas y su longitud se estima entre 7,5 y 8 m. Su análisis de parentesco ha desvelado que su pariente más cercano sería Iguanodon. Dicho estudio coloca al nuevo iguanodóntido en la base de los Hadrosauriformes, siendo más basal -evolutivamente hablando- que otros iguanodóntidos más antiguos, lo que indica que pertenece a un linaje desconocido de estos dinosaurios. Los trabajos paleontológicos llevados a cabo desde el año 2010 en la mina de lignito a cielo abierto Santa María del Grupo SAMCA han permitido detectar, hasta el momento, 97 concentraciones de vertebrados mesozoicos y recuperar más de 5.000 huesos fósiles excavando en una superficie que supera las 15 hectáreas. Este yacimiento se sitúa en el piso Albiense del Cretácico Inferior, que abarca el intervalo comprendido entre hace 113 y 100 millones de años. Dicha edad geológica lo convierte en extraordinariamente relevante ya que los dinosaurios encontrados en sedimentos del Albiense son muy escasos en toda Europa. Los datos preliminares ponen de manifiesto la presencia de diversos tipos de dinosaurios: ornitópodos, tireóforos y terópodos. También se ha recuperado material de tortugas y cocodrilos, peces y diversos tipos de plantas e invertebrados. Además, hay numerosos coprolitos que contienen polen, esporas y bacterias.