Aliaga: “Ayudaremos a paliar el efecto del Brexit en Aragón”

La fecha prevista para que el Reino Unido salga de la Unión Europea es el próximo 31 de octubre y ésta se podría dar con o sin acuerdo y, con ello, las posibles afecciones a las empresas aragonesas. Por ello, desde el departamento de Industria, Competitividad y Desarrollo Empresarial se ha querido convocar a organizaciones empresariales de la comunidad como al Consejo de Cámaras Aragonesas, CEOE y CEPYME e informarles sobre el trabajo que se está haciendo desde el Gobierno de España para “paliar los efectos del Brexit”.

El vicepresidente y consejero de Industria, Arturo Aliaga, ha señalado la importancia de este tipo de reuniones “para estar coordinados” y “compartir las medidas que está arbitrando el gobierno central para mitigar los efectos de la salida del Reino Unido de la Unión Europea. “Si surgen problemas concretos que competen al estado prestaremos nuestro apoyo”, aunque ya se publicó un Real Decreto-ley el pasado mes de marzo por el que se adoptan medidas de contingencia ante el Brexit.

Aliaga también ha destacado la capacidad de las empresas aragonesas y los elementos en su economía y que trabajarán con los recursos e inversiones previstos para que el impacto sea el menor posible. “Las comunidades autónomas trabajaremos con el gobierno central para salir al exterior y, si surgen problemas concretos, prestaremos nuestro apoyo”, ha asegurado el vicepresidente que considera que tiene que hacer de “correa de transmisión para que las organizaciones empresariales tengan toda la información”.

En representación del Consejo de Cámaras Aragonesas ha estado su presidente, Manuel Teruel, que ha querido rebajar el alarmismo. Considera que estamos en una “fase de análisis de la información” para manejar la información existente y que afecte a cualquier sector y que, de ahí, “se pueda mover a Madrid y a la Unión Europea”. “Todavía no sabemos si el Brexit será blando o duro y cada empresa tiene que saber cómo le va a afectar”, ha señalado Manuel Teruel. También ha destacado que las empresas “son una máquina de resolver problemas y plantear soluciones” y que “el Reino Unido también tiene que seguir comiendo, bebiendo y respirando y tiene que dar una salida para que haya estabilidad”.

Por parte de CEOE Aragón ha hablado su presidente, Ricardo Mur, que coincide en la idoneidad de la reunión y en que estamos en “una fase de información”. Ha asegurado que la economía británica tiene un problema al separarse de la economía global de la Unión Europea, pero que esto “abre oportunidades a empresas aragonesas en otros mercados”. “Estamos expectantes para tratar de minimizar las afecciones negativas e intentar potenciar las positivas”, ha resaltado Mur, que ha asegurado tener “total confianza en el mercado aragonés” y ha destacado sus fortalezas.

Por último, también ha participado el presidente de CEPYME Aragón, Aurelio López de Hita, que considera que “cuando hay un problema de este tipo repercute en todo el tejido empresarial”. “Intentamos hacer acopio de información, dialogar, prever e informar a las empresas parta solicitar medidas adecuadas para paliar un problema más de los que tiene el sector”, ha señalado López de Hita. Sobre las pequeñas y medianas empresas aragonesas ha destacado que “siempre son la parte más débil ante cualquier situación, pero son más rápidas a la hora de adaptarse.

Medidas del Gobierno de España

Desde el gobierno central se han intensificado los trabajos para coordinar planes de contingencia entre las administraciones y reforzar con propuestas y medidas la coordinación entre las administraciones. Una documentación que el vicepresidente ha compartido con las organizaciones empresariales en el que se destaca un seguimiento al Plan de contingencias del Estado en materias de ciudadanía (residencia, Seguridad Social, control de pasaportes, asistencia sanitaria, educación, etc.), operadores económicos (conectividad aérea, agricultura y pesca) y coordinación con las comunidades autónomas. También se hace un análisis sobre los sectores que podrían quedar más afectados como las empresas que comercian con Reino Unido, el turismo, la agricultura y pesca, aduanas, asistencia sanitaria, industria, etc.