Aragón reclama una financiación ligada al coste efectivo de los servicios y una estrategia nacional contra la despoblación

El Presidente de Aragón, Javier Lambán, ha abogado en la Conferencia de Presidentes celebrada en Madrid por un sistema de financiación autonómica vinculado al coste efectivo de la prestación de los servicios y  por una estrategia nacional contra la despoblación. Estos han sido dos de los numerosos asuntos que Aragón ha trasladado al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el encuentro mantenido en Madrid con otras comunidades autónomas.

Uno de los acuerdos adoptados ha sido iniciar la reforma del sistema de financiación autonómica a través de una comisión en la que cada comunidad designará un experto. Javier Lambán ha reivindicado que este nuevo sistema tenga en cuenta la prestación de servicios en zonas despobladas, con una elevada dispersión, con una población envejecida y con una orografía que encarece los servicios, como es el caso de Aragón. Y para reforzar este argumento ha aludido a dos ejemplos: el gasto farmacéutico en la Comunidad aragonesa es un 14% superior al de la media española; una plaza escolar en un pueblo de Teruel cuesta una media de 5.500 euros al año mientras en un núcleo urbano el coste es de 3.000 euros. “Abogamos por un sistema de financiación en el que se calcule el coste efectivo en la prestación de los servicios para que una persona que vive en Madrid tenga los mismos servicios que una persona que reside en Gúdar-Javalambre”, ha señalado.

No obstante, el jefe del Ejecutivo autonómico ha solicitado que el coste de la dependencia no se incluya en el sistema de financiación puesto que –ha recordado- emana de una de ley específica. Ha aprovechado, además, para denunciar que el Estado incumple esta norma al no abonar el 50% del coste y financiar solo el 16% en el caso de Aragón.

En este sentido, también ha reclamado la puesta en marcha de estrategias contra la despoblación y ha recordado que Aragón participa en un foro de ocho comunidades que trabajan en la elaboración de una estrategia nacional. Por eso, ha exigido al Gobierno central que asuma estas medidas como “una política de Estado” y que sea capaz de trasladar a la Unión Europea este problema, de forma que lo asuma como una prioridad a la hora de asignar fondos.

El Presidente de Aragón ha expuesto en este foro multilateral la importancia de las comunicaciones transfronterizas y, sin renunciar a medio y largo plazo a la Travesía Central, ha reclamado al Gobierno central “una implicación activa” junto con el Ejecutivo francés por la reapertura del Canfranc. “En este momento lo necesitamos de manera imperativa para desarrollar la logística de la Comunidad”, ha subrayado Lambán, quien ha recordado que Aragón ya tiene “bien encaminadas” las comunicaciones con los puertos.

En la reunión, que se ha prolongado durante más de siete horas, también se ha hablado de la tasa de reposición en las administraciones. Aragón y otras comunidades han planteado libertad para fijarla sin superar el objetivo de déficit ni el gasto de personal. Sobre la tarjeta social, Lambán ha advertido de que no debe confundirse con “un carné de pobre” y ha instado a incorporar en el acuerdo a los representantes del Tercer Sector.

También ha incidido –de acuerdo a lo planteado en la reunión mantenida con los agentes sociales la pasada semana- en la necesidad de activar las políticas de empleo, modernizar el servicio público de empleo, desarrollar con eficacia el plan de garantía juvenil y buscar fórmulas similares a los talleres de empleo o escuelas talleres, así como aprovechar el resquicio que ha dejado el Estado para que las comunidades puedan participar en las políticas sectoriales de Europa.

Lambán ha trasladado también las propuestas recogidas en las reuniones con las fuerzas políticas aragonesas y ha instado al presidente del Gobierno a exigir en Europa una revisión de las políticas de austeridad, que “se han demostrado fracasadas y que han conducido al sur de Europa a una situación de desempleo, precariedad laboral y desigualdad”. Por eso, ha abogado por modificar el plan de estabilidad de acuerdo a las circunstancias de cada país y por cambiar el Plan Juncker. Además, se ha abordado el gravísimo problema de la inmigración y los refugiados y Aragón, junto a otras comunidades, ha exigido “medidas ya”.

Aunque se ha mostrado escéptico con los acuerdos alcanzados en la Conferencia de Presidentes –Lambán ha recordado que hace cinco años también se pactó iniciar la reforma del sistema de financiación autonómica en los mismos términos- , el Presidente de Aragón ha querido transmitir “un margen” de confianza al Gobierno central para cumplir sus compromisos. Y se ha comprometido a que Aragón elabore una propuesta para que esta Conferencia de Presidentes sea “un sistema normalizado y tenga efectos jurídicos y políticos”, de forma que la “intergubernamentalidad sea eficaz”.

“Deslealtad profunda”

No obstante, Javier Lambán, ha exigido lealtad al Estado porque –a su juicio- en los últimos años se ha relacionado con los gobierno autonómicos “en términos de deslealtad profunda, de invasión de competencias constante y de legislar de manera unilateral cargando las consecuencias financieras y económicas sobre las comunidades”. Además, ha recriminado al Gobierno central “el incumplimiento reiterado del Estatuto de Autonomía de Aragón” con recursos ante el Constitucional de leyes como la de Ríos y Aguas o con “nulas” relaciones bilaterales.

Por eso, ha advertido: “Aragón seguirá siendo leal, pero será duro en la exigencia de que el Gobierno de España sea leal con Aragón”.