La Justicia se podrá gestionar en Aragón desde cualquier lugar y en cualquier momento

La Administración de Justicia, competencia de la Comunidad Autónoma de Aragón, va a registrar un nuevo avance con la puesta en marcha de un proyecto de trabajo en movilidad que permitirá a los miembros del Poder Judicial, los Letrados de la Administración de Justicia (LAJ) y la Fiscalía desarrollar su actividad con el nuevo sistema de gestión procesal Avantius desde cualquier lugar y en cualquier momento.

La incorporación de este principio de la sociedad de la información a la Administración de Justicia en Aragón ha superado ya con éxito una fase piloto en la que diez jueces, letrados y fiscales han comprobado las ventajas de poder trabajar durante sus desplazamientos mediante un ordenador portátil dotado con la aplicación de Avantius.

Ahora el proyecto se extenderá al conjunto de los jueces, fiscales y Letrados de la Administración de Justicia, según se ha acordado en una de las reuniones de trabajo que han mantenido esta mañana en la sede del Tribunal Superior de Justicia de Aragón en Zaragoza la directora general de Justicia e Interior del Departamento de Presidencia, María Ángeles Júlvez, y el jefe de servicio de Tecnologías de la Información, Ángel Sanz, con el presidente del TSJ, el Fiscal Superior de Aragón, las secretarias coordinadoras provinciales de Huesca, Teruel y Zaragoza, los fiscales jefe provinciales de Huesca y Zaragoza y el juez decano de Zaragoza.

También han asistido distintos magistrados, fiscales y LAJ que han realizado la primera experiencia piloto, que han valorado muy positivamente el sistema de trabajo que se sometía a su prueba y consideración.

Este sistema de trabajo en movilidad permitirá a los jueces, fiscales y LAJ trabajar tanto desde su propio domicilio como desde las salas de vistas, salas de reuniones y cualquier sede judicial de Aragón. Será de gran utilidad para todos y especialmente para los fiscales, dado que se desplazan con frecuencia a diferentes juzgados mixtos de la Comunidad Autónoma. Por eso se espera que lo utilicen todos los fiscales, así como los jueces y LAJ que lo soliciten.

En una primera fase está previsto distribuir aun centenar de portátiles con la aplicación de Avantius, con un coste de 1.500 euros por unidad, lo que supone por tanto un gasto de 150.000 euros. Conforme se extienda este sistema de trabajo remoto también se producirá e irá incrementando un ahorro en los costes que supone el trabajo presencial en cada destino, aparte de una mayor agilización de los procedimientos judiciales.